El Intermedio regresa con una nueva entrega de 'Secretos Ibéricos', un espacio donde los españoles pueden compartir sus confesiones más íntimas sin revelar su identidad.
En esta ocasión, el programa les pidió que hablaran sobre sus peores jefes, y, como era de esperar, muchas de las respuestas provinieron de trabajadores de la hostelería.
Sin embargo, la historia que más destacó fue la de un padre y su hijo, quienes trabajan juntos. El hijo confesó que su padre no para de pedirle que mueva las cosas "a donde ya estaban, como si fuera algo nuevo". En su defensa, el padre respondió, que al ser su hijo, "hay más confianza, y por eso puedo darle más caña".
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A pesar de la relación familiar, el hijo no tiene dudas: "el peor jefe es un padre".
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