Un documento demuestra que la empresa organizadora comunicó al Ayuntamiento de Madrid una fiesta para "7.000 asistentes aproximadamente". El vicealcalde de Madrid declaró ante los medios que eran 9.600 las entradas que se habían vendido. "Esto demuestra que el vicealcalde mintió de forma vergonzosa", ha señalado Eduardo Inda. "El vicealcalde parecía un portavoz de la empresa a la hora de dar la versión oficial. La alcaldesa debería mandarlo a su casa pero ya mismo, porque ha mentido".

García Ferreras ha remarcado que, teniendo este documento en su poder, el Ayuntamiento mintió al dar la versión oficial de los hechos. Para el antropólogo Javier Aroca es necesario que "se pidan responsabilidades políticas por lo sucedido". "El documento es estremecedor no sólo por el aforo, sino por los otros datos que da sobre el evento. Habrá que comprobar si cumplieron todos los parámetros de organización y seguridad".