En España, la ley prohíbe llevar armamento y munición real a un rodaje. Solo hay tres tipos de armas permitidas. El primero son las simuladas, que son réplicas como las que aparecen en este vídeo, hechas de plástico, caucho o metal. Unas son macizas, sin mecanismos, y otras sí los tienen, pero simulados.

En este sentido, José Antonio Rojo, director de 'especialistasdecine.com' señala que "tiene los mecanismos y dispara, pero son de mentira. El cargador está cerrado. No puede entrar ningún tipo de munición".

En el vídeo, mostramos una secuencia rodada con un arma simulada, que no hace nada. El realismo se le da por ordenador, buscando la llama en un surtido de efectos de fuego, colocándola sobre el cañón, y trabajando digitalmente sobre la imagen para que todo parezca real.

El segundo tipo de arma permitida en rodajes son las de fogueo. Nunca han podido disparar y su mecanismo solo permite introducir pequeños cartuchos de pirotecnia, que hacen ruido y emiten una llama.

Además, también se permite usar armas inutilizadas que fueron reales, pero su cañón está obstruido para que no puedan disparar.

Además, la ley tiene tres exigencias más: la película tiene que alquilarle las armas a una armería autorizada, cada día que una pistola vaya a un rodaje, debe saberlo la Guardia Civil, y siempre tiene que haber un armero presente durante la grabación. No hacerlo así implica una infracción grave, castigada con multa.

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