La Policía encontró las imágenes
Detienen al 'Pelicot' belga: drogó, violó y grabó a su mujer durante una década
Los detalles La víctima comenzó a sospechar porque siempre se levantaba muy mareada y a menudo tenía problemas de memoria. Fue un análisis de sangre el que reveló concentraciones muy altas de somníferos y sedantes en su organismo.
Un hombre de 50 años de Limburgo (Flandes) ha sido detenido por drogar a su mujer para violarla y grabarla durante 10 años, según ha informado este sábado la prensa local. El detenido, que trabajaba en una sucursal bancaria, administró somníferos y sedantes a su mujer para violarla con diversos objetos, tomar fotos y grabarla, ha indicado el diario flamenco 'Het Belang'.
Fue la Policía la que encontró las imágenes de las violaciones en un dispositivo informático del sospechoso, tras lo que se procedió a su detención. Así, los agentes comprobaron que los hechos presuntamente ocurrieron durante un período de aproximadamente diez años, en los que el hombre le suministraba a su pareja los medicamentos que tenía recetados a su nombre, sin que ella lo supiera.
La propia víctima comenzó a sospechar de lo que estaba ocurriendo porque siempre se levantaba muy mareada y a menudo tenía problemas de memoria, y al realizarse un análisis de sangre durante un examen toxicológico, se reveló que tenía concentraciones muy altas de somníferos y sedantes en su organismo. A partir de ese momento, la mujer halló en su domicilio juguetes sexuales y otros objetos que ella nunca había utilizado.
La investigación criminal de la Policía moral del distrito policial local de Limburg Regio Hoofdstad (LRH) está prácticamente concluida, según la prensa local, y una vez concluida, la Cámara del Ayuntamiento de Hasselt podrá remitir el caso al Tribunal Penal de Hasselt.
Similitudes con el caso de Gisèle Pelicot
Este caso tiene similitudes con el de la francesa Gisèle Pelicot, quien también fue drogada y violada por su esposo Dominique Pelicot entre 2011 y 2020. El hombre, además, invitó a decenas de individuos, a través de una página web, para que abusaran de ella mientras la víctima estaba inconsciente.
Pelicot, víctima de una brutal sumisión química a lo largo de una década, hizo público su juicio para que todo el mundo pudiera ser testigo de las brutales agresiones y violaciones a las que su marido la sometió, quién, además, la drogaba para realizar sus brutalidades.
Tras anunciarse la sentencia de 20 años de prisión para su exmarido y las penas para el resto de violadores, Gisèle Pelicot habló ante los periodistas para agradecer el apoyo recibido: "Ahora tengo confianza en nuestra capacidad para aprovechar colectivamente un futuro en el que todos, mujeres y hombres puedan vivir en armonía, con respeto y comprensión mutua", expresó, tras lo que reivindicó su decisión de abrir el proceso judicial.
La conmoción mundial por este caso dio lugar a manifestaciones de apoyo a Pelicot que se extendieron por toda Francia y también fuera de ella. Durante todo este tiempo, la mujer ha luchado para que fueron sus violadores, y no ella, quienes sintieran vergüenza por lo ocurrido, rompiendo también con el imaginario de que hay un perfil o un prototipo de violador.