¡Que os den!: quizás la frase que mejor describe el malestar ante la crisis

Hay dos tipos de jóvenes realizadores: los que escriben guiones increíbles sobre cosas que desconocen completamente, y los que describen algo sencillo y que conocen muy bien. Los primeros suelen fracasar, porque se necesita mucho talento y mucho dinero para rodar historias increíbles. Y los segundos a veces ganan un Goya y se van a Cannes, por lo menos ese es el caso de Laura Ferrés ('Los Desheredados').

“Mi bisabuelo fundó la empresa. Casi todos los miembros de mi familia han trabajado ahí. Concretamente, mi padre trabajó desde los 18 a los 53 años. Cuando me dijo que iba a cerrar, me preocupé mucho porque ya había visto pasar a mi madre y a su pareja por la misma situación. Pensé: Otra vez, no”, recuerda Laura.

Desde que salió de la universidad, hace cuatro años, Laura no había cogido la cámara. Lo hizo porque la historia se le iba a escapar de las manos. Sin un equipo de rodaje que le apoyara y sin dinero que invertir, se lanzó a grabar con lo puesto. “ Todo fue a contrarreloj: sólo tuve un par de meses para escribir y rodar, puesto que mi padre se estaba deshaciendo de los autocares e instalaciones”, comenta.

'Los Desheredados' es la gente golpeada por la crisis. En especial, los que pertenecen a la generación de nuestros padres. Se ha hablado bastante de los jóvenes, pero no tanto de ellos.

“Es cierto que los jóvenes lo tenemos difícil, pero creo que si has nacido en unas circunstancias complejas, al menos tienes una capacidad de adaptación distinta. En cambio, ellos han tenido que reinventarse tras una vida trabajando en un momento histórico que los ha expulsado del sistema”, dice Laura.

Pese a ser una historia muy personal, probablemente consiga más empatía que los cinco primeros taquillazos del cine español, sean los que sean. La mitad de España conoce bien la sensación de caminar por la cuerda floja, en este caso el padre de Laura es un hombre cerrando su negocio mientras su hija lo filma con el poco dinero que gana. Eso no tiene por qué hacerlo bueno necesariamente, pero desde luego es una apuesta con verdad y valentía, que muestra una realidad que los medios obvian.

'Los Desheredados' es una reacción a ese malestar que el padre de Laura resume en el cortometraje cuando dice: “Que os den por culo”.

“Ese ‘os’ representa a los que ningunean, explotan y llevan al borde la locura a tanta gente, es decir, los políticos y también las empresas que han aprovechado la coyuntura para ahogar a la gente. Esa sigue siendo la realidad de muchos después de más de 10 años de crisis. Se dice pronto, ¿verdad? Lo que pasa es que los medios nos mantienen distraídos con otros temas”.

El universo que muestra 'Los Desheredados' es un cosmos acelerado de recuerdos de la propia Laura Ferrés a lo largo de estos años, situaciones que ocurrieron en algún momento de su historia familiar y que fueron recreados a cámara con sus dos únicos actores visibles: su padre y su abuela. El resto de personajes permanecen en una nebulosa de fuera de campo, presentes solo por su voz y golpes.

Y entonces Laura ganó un Goya, al mejor corto documental, mientras que una distribuidora apoyó el corto para proyectarlo en salas comerciales, cobrando entrada, algo inusual en el circuito de exhibición de los cortometrajes. Y el corto llegó a Cannes. Esa es la historia de Laura Ferrés, que convirtió la crisis de su familia, en el mejor de los principios.

“Mi padre siempre dice que se alegra de que algo tan triste como el cierre de la empresa haya terminado siendo positivo. Mi abuela también está muy contenta y siempre bromea con que mucha gente de alrededor del mundo la está viendo vestida en bata de estar por casa. Personalmente, me alegro”, comenta Laura.