Por eso, los expertos recomiendan estar atentos ante los posibles síntomas que pueden alertarnos de que poder padecer EPOC. 

Si una persona que fuma habitualmente tiene estos tres síntomas: tos, expectoración y/o disnea es probable que padezca EPOC.

Para comprobarlo tendrá que someterse a una espirometría, que es una prueba sencilla para la detección de esta dolencia pulmonar.