OCÉANO ATLÁNTICO
Las increíbles islas de Portugal con aguas cristalinas y una fortaleza sobre el océano
Las islas que rodean a la península ibérica reservan verdaderos paraísos a quienes las visitan. Entre las muchas que hay, este archipiélago de Portugal esconde varios secretos que merece la pena descubrir.

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Muy cerca de la costa de Portugal, concretamente a 15 kilómetros, emerge un archipiélago de islas de granito catalogado como Reserva Natural. Un lugar paradisíaco que, ya en la Edad Media, fue protegido para mantener intacta su biodiversidad. Las Islas Berlengas son el destino perfecto para quienes quieren conectar de lleno con la naturaleza y bucear por las aguas del Atlántico.
El archipiélago está formado por tres islas: Belenga Grande, Estelas y Farilhões. La primera es, como su propio nombre indica, la más grande y alberga en su superficie una gran fortaleza. Se trata del Fuerte de San Juan Bautista y, aunque no está claro cuando se edificó, se sospecha que se remonta al siglo XVI. Una construcción de carácter militar que se puede recorrer en su totalidad, contemplando la mejor de las panorámicas al Atlántico.
Sin embargo, el origen de las Berlengas va mucho más atrás de la era medieval. De hecho, civilizaciones fenicias y romanas surcaron sus aguas en la Antigüeda. Ahora, esta Reserva Natural de la Biosfera por la UNESCO, cautiva a los visitantes que se acercan a las islas tanto por mar como por aire.
En lo que respecta a sus playas, hay mucho entre lo que elegir. La Playa da Berlenga Grande, la Playa do Forte o la Playa Cova do Sonho son litorales de aguas turquesas y explanadas de arena en las que tumbarse para disfrutar de veladas bajo el sol. Esto, sumado a los perfectamente conservados fondos marinos, han convertido al archipiélago en el destino idóneo para los aficionados al buceo y al snorkel.
El avistamiento de aves es otra de las actividades favoritas entre los turistas. Eso sí, es importante tener cautela y no molestar a las gaviotas, tan propensas a proteger sus nidos con menos amabilidad de la que uno podría esperar.
Contemplar la majestuosidad de sus acantilados, entrar en kayak en sus grutas o caminar por el Barrio de Pescadores son también experiencias que hacen de las islas Berlengas un auténtico paraíso oceánico.
Para llegar a las islas Berlengas simplemente hay que tomar el barco Cabo Avelar Pessoa desde Peniche, municipio portugués en la península. Esta localidad, además de ser el punto de partida hacia el archipiélago, tiene numerosas playas y un imponente valor histórico. Un lugar en el que los ataques piratas o incluso los estragos de la Primera Guerra Mundial dejaron huella.
El Atlántico está repleto de entornos únicos en el mundo y este archipiélago es uno de los más hermosos. Aunque cabe recordar que solo un número reducido de personas lo pueden visitar cada día; así que lo más recomendable es reservar plaza con tiempo. ¡No te quedes en el puerto por falta de previsión!
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