España
Molino de la Ferrería, posada de la arquitectura roja
Un remanso de paz y tranquilidad en plena Sierra de Ayllón
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Si lo que estás buscando es una escapada romántica. O si lo que quieres es pasar unos días en el campo, relajándote con los sonidos de los pájaros por la mañanas. Si te gusta pasear entre bosques al lado de un río. O tomar algo sentado al sol y por la tarde al lado de la chimenea. Y además te gusta el trato personal. Todo lo vas a encontar en el Molino de la Ferreria. En Villacorta, en plena ruta de los pueblos de la arquitectura roja, y en plena Sierra de Ayllón. Este encantandor hotel rural, es un rincón que debes conocer. Al Molino de la Ferrería se llega después de pasar por un camino rural, a orillas del río Vadillo. La casa se alza roja, un Antiguo molino harinero, totalmente rehabilitado, situado en un entorno espectacular, en plena naturaleza. Un precioso edificio que conserva sus gruesos muros de piedra y su carácter rural, una gran casa que sigue fiel a sus orígenes, y que destaca por los colores rojizos de sus paredes. Una decoración rústica, conservando todas las piezas originales y los detalles que hacen de este lugar un hotel cálido y acogedor. Y todo con un trato personal, el de sus propietarios Mónica y Alejandro, que aman profundamente su casa y se nota. Lugares comunes cómodos y confortables, con grandes ventanales desde los que disfrutar vistas del bosque, del río y del gran jardín exterior, el salón con 120 metros cuadrados con chimenea, biblioteca, zonas de juego, lectura y tertulia, donde se conserva intacta la maquinaria del molino. Y en el exterior, una preciosa terraza y un gran jardín con zonas de estar a orillas del río Vadillo, cuyas aguas movían antiguamente el molino, un jardín que invita al descanso. El Molino dela Ferrería cuenta con 10 acogedoras habitaciones, todas decoradas con un estilo rústico, con baño privado, televisión y Wifi. En el baño encontrarás productos de acogida. Habitaciones desde 85 euros la noche por persona con desayuno incluido. Y en cuanto a la restauración, el Molino de la Ferrería cuenta con uno de los restaurantes más conocidos de la zona, con cocina de temporada y platos como la parrilla de verduras, la ensalada templada de cogollos y codornices escabechada, picoteo y platos de cuchara y tenedor del día, cordero lechal asado por encargo y todos los domingos en invierno, también un espectacular cocido, por encargo. El restaurante está abierto al público también para aquellos que no están alojados en el hotel. Disponen de un menú infantil muy amplio, los niños son más que bienvenidos. Si te apetece conocer los alrededores, hay mucho que hacer cerca de aquí. En primer lugar porque nos encontramos en plena ruta de los pueblos rojos, en Villacorta. Y muy cerca de Madriguera, un pueblo con mucho encanto del que te vas a enamorar. La ruta sigue hasta Ayllón y veremos el color rojo de las tierras y las edificaciones y una sucesión de bosques de robles, encinas y quejigos que en otoño muestran todo su esplendor. Hacia Riaza, a mitad de camino encontraremos la Ermita de Hontanares, que merece la pena solo por el camino entre robles que lleva hasta ella. Hay muchos paseos, zona de parque infantil para los niños, y cerca, un mirador espectacular sobre el valle y la Sierra. Se puede acceder a él en coche o andando desde la ermita. Desde el Molino de la Ferrería podemos visitar el Parque Natural de las Hoces del Río Riaza, que si no lo conoces, es impresionante, o el yacimiento arqueológico de Tiermes, restos celtíberos y románicos conocidos como la Pompeya española, situado en Montejo de Tiermes, en la provinvia de Soria, a tan solo 30 kilómetros del hotel. Una escapada rural, al campo, campo. Un rincón en Segovia que tienen mucho que ofrecer. Un hotel con mucho encanto para disfrutar de la naturaleza. El Molino de la Ferrería te encantará.
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