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ARQUEOLOGÍA EN CASTILLA-LA MANCHA

La ciudad isla de los musulmanes

Calatrava La Vieja es uno de los yacimientos medievales más importantes y mejor preservados de la Península, así como de los más desconocidos. Su carácter defensivo inundaba de agua la ciudad, lo que la convirtió en una isla en plena Meseta. Hoy la puedes visitar en familia.

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No muy lejos de Madrid, en la provincia de Ciudad Real, uno puede acercarse a una historia que se remonta al siglo IX. En aquel entonces, una de las ciudades islámicas más antiguas de la Península, citada ya en tiempos de Abderramán I en el año 785, era Calatrava La Vieja. Y no era una ciudad cualquiera, porque tuvo un papel fundamental al convertirse en la capital de una amplia región.

La antigua Qal'at Rabah islámica es uno de los yacimientos medievales más importantes y mejor preservados de la Península. Su historia, junto al río Guadiana, transcurre entre los siglos VIII y XV. Siempre con un papel fundamental en la Meseta, fue concebida como un punto avanzado de control al servicio de Córdoba frente a la levantisca Toledo. De hecho, la ciudad fue Capital de la región durante los tres siglos de dominio omeya en Al Andalus.

La 'ciudad isla' de los musulmanes se puede recorrer mientras nos imaginamos el abundante caudal del río que en tiempos formaba parte de su sistema defensivo. En aquel entonces, con el río alrededor, la ciudad era una auténtica isla, de ahí el sobrenombre. Y podemos ver parte de sus estructuras como el foso, el recinto amurallado y dos puertas acodadas. La muralla está rodeada de cuarenta y cuatro torres, y de corachas, que son estructuras construidas para abastecer de agua a la ciudad en caso de asedio. Inspirado en modelos orientales las corachas tenían ruedas hidráulicas que introducían el agua del río en la ciudad,  tecnología puntera en aquellos tiempos de la que gozaba el reino cordobés.

El asentamiento se divide en dos zonas: el alcázar y la medina. En el primero se puede ver un magnífico arco triunfal de acceso, la gran sala de recepciones, el aljibe así como las sucesivas ampliaciones islámicas. Y de la medina quedan restos de las mezquitas, baños y comercios, así como, de habitaciones y calles.

En el siglo XII la ciudad paso a manos cristianas y se fundó allí la Orden de Calatrava, con sus monjes guerreros y los únicos que mantuvieron una fortaleza en manos cristianas tras la derrota de la Batalla de Alarcos. Ayudaron después a conseguir la victoria de las Navas de Tolosa y tuvieron un papel fundamental en la Reconquista, constituyendo una de las órdenes más poderosas por su capacidad económica y militar.

De la corta presencia de la Orden del Temple en Calatrava podemos ver los restos del ábside de una iglesia que no terminaron y que es el edificio templario más antiguo del reino de Castilla. Y de la ciudad en manos de la Orden de Calatrava ha llegado hasta nuestros días una iglesia y un edificio conventual, con numerosas dependencias distribuidas en torno a un pequeño claustro contiguo al aljibe. El aljibe fue utilizado como mazmorra y en sus paredes aún pueden verse las pintadas y grafitos de los prisioneros.

Este parque arqueológico es muy interesante, y seguro que desconocido para muchos. Así que si eres un amante de la historia y de los yacimientos, en el Parque Arqueológico de Calatrava La Vieja vas a disfrutar como nunca. Los espectaculares restos de esta vieja ciudad son hoy el testigo de su fascinante historia, y nos permiten dar un completo viaje por el pasado medieval de la región.

Más información:
A 8 kilómetros de Ciudad Real por la N-430, dirección a Piedrabuena. La tarifa general es de 4 euros. Si quieres más información, o reservar una visita  guiada, debes contactar en el teléfono 649 728 752.
Parque Arqueológico Calatrava la Vieja

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