Asia
Xian, algo más que sus guerreros
Un paseo alrededor de la Gran Mezquita.
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Esta ciudad situada en el centro de China, fue elegida por los emperadores de 13 dinastías como la capital del reino durante mas de 2000 años. Tiene un bagaje cultural e histórico tan amplio que hacen de ella uno de los principales atractivos turísticos del país. Conocida mundialmente por su sobrecogedor y enigmático ejército de Guerreros de Terracota, que Qin Shi Huang, primer emperador de China, ordenó construir para que le protegiese de sus enemigos en el más allá. Este ejército está distribuido en tres fosas, la primera con más de 6.000 figuras de tamaño real alineadas en formación, la segunda con 1.000 guerreros, 500 caballos y más de 80 carros (muchos de ellos sin restaurar y sin desenterrar) y la última la reservada a 69 figuras que representan a generales y altos cargos del ejército. Pero Xian es algo más que este yacimiento arqueológico. Uno de los lugares con más encanto y personalidad de la ciudad que encontramos en pleno centro histórico, dentro de su recinto amurallado entre la Torre del Tambor y la Torre de la Campana (otra de las joyas arquitectónicas de la ciudad que merece la pena visitar sobre todo de noche para verla iluminado), es el Barrio Musulmán. En esta zona la vida gira en torno a la Gran Mezquita que nos remonta a los tiempos históricos en que la minoría hui de religión musulmana comenzaba a expandirse. Con una decoración islámica mimetizada con las características del arte chino, llama la atención las inscripciones del Corán en caligrafía árabe de sus muros y sus arcos junto al minarete decorado con elementos orientales. Y para ver la esencia y autenticidad de este humilde barrio nada mejor que adentrarnos en su zoco, calles sombrías que al mismo tiempo están llenas de vida, por las que deambulan hombres con sus chilabas y algunas mujeres que cubren su cabeza con el hiyab. En el encontramos multitud de teterías, puestos de comida callejera, comercios y para los amantes de la artesanía nada mejor que ir al callejón de Huajue Xiang donde podemos comprar cerámica, objetos de jade, bronce y por supuesto las famosas reproducciones de las figuras de los guerreros. Eso sí, siempre regateando.
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