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Ruta del Ferrocarril White Pass & Yukon

Un viaje en tren permite revivir la 'Fiebre del Oro'

Nos subimos al White Pass & Yukon, un tren histórico cuyo recorrido permite viajar por los mismos raíles que lo hicieran los vagones cargados de oro durante la gran época dorada de la minería en el Pacífico Norteamericano. Un ferrocarril único y pionero que simboliza el logro de la aventura y el triunfo sobre el desafío.

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Viajar por los mismos rieles por los que viajaban aquellos que lo hacían en busca de oro es toda una aventura que comienza en Alaska. Un viaje en un ferrocarril de vía estrecha que nos lleva desde la bella ciudad de Skagway al corazón del territorio del Yukón, el más occidental de los tres territorios del norte de Canadá. Pero no solo eso, porque el White Pass & Yukon Route Railroad es mucho más. Un ferrocarril histórico que a nivel internacional está considerado como todo un hito de la ingeniería, tanto como los están la Torre Eiffel, la Estatua de la Libertad, y el Canal de Panamá.

Este ferrocarril, que comenzó a construirse en el año 1898 durante la fiebre del oro para llegar a los yacimientos, se convirtió en 1900 en la primera y única manera de viajar al interior del Yukón sin peligro, suplantando a la Chilkoot Trail y a otras rutas mucho más complicadas. Y hoy se ha convertido en todo un símbolo, y en una de las atracciones turísticas más solicitadas de Skagway.

Y es que esta travesía histórica nos llevará más allá de ríos glaciares, cascadas y gargantas, y nos permitirá experimentar de forma increíble la esencia de la Alaska más salvaje. El ferrocarril sube más de 900 metros de altitud y en su recorrido ofrece impresionantes vistas panorámicas pasando por lugares que han dejado su impronta en la historia de la zona. Como el desfiladero Dead Horse Gulch o las cabeceras del famoso río Yukon.

Uno puede imaginar a los trabajadores de esta línea de ferrocarril colgando de las paredes rocosas por cuerdas, y las 450 toneladas de explosivos que se utilizaron para poder ir abriendo camino. Una frase para la historia es la que pronunció el contratista Michael J. Heney: "Dame suficiente dinamita y te voy a construir un ferrocarril al infierno". 35 murieron trabajando aquí.

El tren recorre desde entonces las vías de un sistema aislado sin conexión directa con ningún otro ferrocarril. Desde Skagway cualquier otro transporte pasa por el barco y en algunas paradas del recorrido, si uno quiere continuar tiene que hacerlo por otros métodos. De hecho hay otras excursiones que se pueden realizar desde esos otros puntos. La excursión de tres horas hasta White Cumbre comienza en la estación de Skagway, pasa por la tumba del bandido más famoso de la ciudad, Soapy Smith o Smith jabonoso, y a continuación, sube 20 millas por pendientes pronunciadas  en torno a estrechos y peligrosos acantilados y desfiladeros, e incluso pasa por algunas curvas de suspensión construidas en madera.

Así, las calles de Skagway en Alaska, son la puerta de entrada a la última frontera de América. Por el camino hacia el territorio Yukón, haremos paradas naturales e históricas, y a medida que uno avanza, sentirá la vida tan extrema y el sufrimiento que padecieron los hombres que en aquellos tiempos cruzaban estos peligrosos parajes en busca de oro por el Chilkoot Trail, el sendero de 53 kilómetros a través de las montañas que va desde Dyea, Alaska, en Estados Unidos, a Bennett, Columbia Británica, en Canadá. Una importante ruta de acceso desde la costa hasta los yacimientos de oro del Yukón a finales de 1890.

Hoy en día, el ferrocarril es una filial de Clublink y está operado por el Ferrocarril del Pacífico y del Ártico, y por su compañía de navegación en Alaska, por la empresa Columbia Yukon de Ferrocarriles Británicos en British Columbia en Canadá y por la Compañía británica Ferroviaria Yukón, conocida originalmente como Yukon Minería, cuyo nombre comercial es White Pass y Yukon Route. Los trenes salen a las 8.15 h. todos los días, y a los martes y miércoles también a las 16.30 h.

Viajaremos meciéndonos suavemente a bordo de coches de salón, algunos de época, algunos réplicas, con enormes ventanas y visualizando las cubiertas de proa y de popa de cada vehículo. Al mirar hacia abajo veremos el camino tallado sobre las laderas que recorre el ferrocarril.

Vuelve a vivir la fiebre del oro con la Ruta del Ferrocarril White Pass & Yukon, y a disfrutar de sus trenes a vapor todavía en activo. Un viaje en tren de ida y vuelta en el que podrás disfrutar del panorama y conocer un poco más este ferrocarril único que simboliza el logro de una aventura pionera.

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