Viajestic » Destinos

TURISMO ACTIVO EN HAVASU FALLS

Trekking en el oasis azul del Gran Cañón

Una cascada increíblemente hermosa situada en un remoto cañón es el destino de senderismo más apasionante de Arizona. Sin posibilidad de realizar el camino de otra forma que no sea andando, nos esperan hitos naturales únicos y la maravillosa sensación de nadar entre acantilados.

Publicidad

La cascada Havasu es uno de los saltos de agua más famoso de Norteamérica. Lo es por un detalle que no puede pasar desapercibido: su espectacular color, un vibrante turquesa que recuerda al de los paraísos polinésicos, pero que se encuentra a miles de kilómetros de estas islas. Concretamente, en un remoto cañón del estado de Arizona. Se necesita una buena forma física para llegar allí, pero la recompensa merece la pena.

Las Havasu Falls, como se conocen a estas cascadas en el Estado norteamericano, se encuentran en el borde sur del Gran Cañón, en la Reserva India de Havasupai. Cuando llegas, te encuentras en un lugar sin igual, un oasis en el árido desierto que te deja con la boca abierta. El agua azul contrasta contra las llamativas rocas rojas de las paredes del cañón. Además, la cascada forma una amplia playa de arena, rodeada de muchos álamos que te cobijan con su agradable sombra. El resultado: una piscina natural maravillosa en la que nadar entre acantilados.

La caminata a Havasu Falls comienza en Hualapai Hilltop, a unos 160 kilómetros de Seligman, la ciudad más cercana. Los primeros 2,5 km. de recorrido transcurren por una fuerte bajada hasta el fondo del Cañon de Hualapai. El resto del camino, afortunadamente, es por un terreno más llano.  Andar a lo largo de la parte inferior del Hualapai es una experiencia increíble, ya que no todos los días podemos hacer senderismo a través de un barranco empinado con paredes de roca que se elevan sobre nuestras cabezas. Un largo paseo que desemboca en la cala de Havasu. A partir de ahí, a unos 2,5 km., se encuentra la aldea de Supai, en el corazón de la Reserva, enmarcada por las altas paredes de colores del Cañón. En total, habremos recorrido hasta Supai cerca de 13 kilómetros.

Además de la belleza natural de la zona del Gran Cañón, el mayor atractivo de esta caminata son las cuatro cascadas de color azul turquesa y verde esmeralda que, juntas, forman un paisaje inigualable lleno de vida. Además de las Havasu, no hay que dejar de ver las cascadas Navajo, Mooney y Beaver. Son sencillamente mágicas. El arroyo Havasu Creek, alimentado por manantiales con un alto contenido de minerales, cae formando piscinas y embalses naturales de travertino. Poco después de entrar en el camino al oasis y a la zona de acampada, el sonido del agua se puede oir intensamente mucho antes de ver las cascadas.

Las cascadas de Havasu Falls están unos tres kilómetros más allá de la aldea. Es una cascada doble a lo largo de la cala de Havasu, que cae en una piscina de aguas cristalinas, ideal para nadar en un día caluroso. Hay una amplia zona de arena para descansar y comer delante y, si te apetece, nada mejor que subir a la parte de arriba, a la cima de la cascada, para observar el salto de agua desde arriba.

Hualapai Hilltop es de nuevo el punto al que hay que regresar, desandando el camino andado. Se encuentra al final de la carretera 18, que está a unos 104 kilómetros al norte de la Ruta 66. Hay que tener cuidado con el ganado y la vida silvestre, especialmente cuando conduces por la noche.

Lo que vas a necesitar para la travesía y para acampar en Havasu Falls es un buen par de zapatos de senderismo y calcetines apropiados. Los zapatos deben ser también apropiados para el agua (los necesitaras para nadar y caminar por el río); y a estos hay que sumar un pequeño botiquín de primeros auxilios, especialmente si piensas acampar, ya que la tienda más cercana está a algo más de 3 kilómetros de distancia; repelente de mosquitos, equipo de mochilero, una pequeña estufa de camping gas, utensilios de cocina, saco de dormir, una pequeña tienda de campaña, alguna colchoneta ligera para acostarte y, por supuesto, linternas.

Recomiendan, además, un cargador solar para cargar los teléfonos y pilas, una cámara GoPro para inmortalizar el momento, algo de cuerda para colgar la ropa y la basura (para que las ardillas no rebusquen en ella), jabón biodegradable y, por supuesto, alimentos y agua. En la zona de acampada hay un manantial natural para rellenar tus botellas de agua. No hay servicios o agua en la colina, así que acuerdate de llevar bastante de agua potable.

Puedes realizar el camino de ida y vuelta en un mismo día. Eso si, recuerda que son 13 kilómetros de ida y 13 de vuelta. ¿Te animas?

Más información:
Havasu Falls

Publicidad