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EL RINCÓN MÁS TURÍSTICO DE NORUEGA

Todo lo que debes saber para subir al Preikestolen

El Púlpito se ha convertido en un símbolo del país escandinavo. Cada año, miles de turistas se acercan a conocerlo y a disfrutar de sus espectaculares vistas a 600 metros de altura sobre el fiordo Lysefjord. Con nuestros consejos, solo tendrás que preocuparte de disfrutar de la experiencia.

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El Preikestolen es uno de los sitios más visitados de Noruega, un lugar que prácticamente se ha convertido en un icono. Por eso, este acantilado de 600 metros de altura, situado en la costa suroeste del país, es una de esas visitas obligadas. Y, además, conviene hacerla precisamente ahora, en verano. Las fechas más recomendables para acercarse a verlo son de junio hasta principios de septiembre. Fuera de esos meses está contraindicado por su peligrosidad. ¿Por qué es tan recomendable? Por la sencilla razón de que el Preikestolen o Púlpito (en su traducción directa del noruego) ofrece unas vistas espectaculares y se trata de una maravilla de la naturaleza creada tras miles de años de glaciaciones.

La ciudad grande más cercana es Stavanger. Llegar hasta allí y utilizarla como centro de operaciones es el mejor plan, ya que cuenta con muchos lugares en los que alojarse y así no tendrás problema a la hora de encontrar un hotel, hostal o albergue en donde pasar la noche. La oferta es muy amplia y, además, es un lugar agradable para el visitante, con sus casas de cuento y sus calles empedradas. Tendrás a mano supermercados, restaurantes y tiendas. A Stavanger se puede llegar en avión (está conectada con varias ciudades de Noruega) o en ferry desde Bergen.

Si llegas tarde a Stavanger, lo mejor es que pases la noche allí y realizar la excursión por la mañana temprano. Hay dos razones principales: la primera, que no es aconsejable subir hasta el Púlpito a última hora de la tarde y que se te haga de noche, podrías perderte con facilidad. Y la segunda, que desde Stavanger hasta el comienzo de la caminata en dirección al Púlpito todavía es necesario llegar primero hasta la aldea de Tau, a la que sólo se puede acceder en ferry (la duración de este trayecto es de 20 minutos) y posteriormente deberás tomar un autobús que te lleva hasta el lugar donde empieza la caminata (son otros 20 minutos de viaje). Por cierto, antes de subir al Preikestolen acuérdate de consultar el parte meteorológico y, si anuncian lluvias, descarta el plan y organízalo cualquier otro día.

Contabilizando el ferry y el autobús, más el paseo hasta el Púlpito (2 horas de subida, una hora y media de bajada), el tiempo aproximado de la excursión es de 6 horas. ¿Es necesario estar en forma? Aguantarás mejor si estás en buenas condiciones físicas, aunque se trata de una ruta que hace gente de todas las edades. Por lo tanto, no es un camino difícil pero conviene estar preparado (especialmente porque te encontrarás con alguna empinada cuesta). Es importante que lleves el calzado adecuado, ya que el terreno es pedregoso y en algunas zonas resbaladizo. Olvídate de llevar chanclas, tacones o sandalias. Además, ten en cuenta que cuando llegues al Preikestolen no hay ninguna valla de protección, ni quitamiedos alguno. Llevando unas buenas botas de montaña o zapatillas de trekking evitarás tropezones inoportunos.

Ten en cuenta que para realizar el recorrido invertirás unas cuatro horas, así que es importante que lleves algo de comida: bocadillos, sandwiches, algo de fruta... Lo que necesites para reponer energías.

Cuando alcances la cima, podrás contemplar unas vistas impresionantes del fiordo Lysefjord, que significa 'fiordo de la luz'. Entonces te darás cuenta de que el esfuerzo ha valido la pena. La bajada es mucho más llevadera. Ten en cuenta que todavía tendrás que coger un autobús y un ferry hasta llegar de nuevo a Stavanger.

De vuelta en la ciudad podrás disfrutar de las comodidades de la civilización y descansar. Y al cerrar los ojos, quizás entre tus sueños, se filtren las maravillosas vistas que te ofreció el Púlpito y así podrás comparar y decidir si te gusta más soñar con él o poder decir: "Yo he estado allí".

Más información:
Turismo de Noruega

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