Siete hoteles de Gran Lujo con mucho zumbido en el tejado

Los techos de los hoteles se han convertido en los protagonistas de las grandes revoluciones en los establecimientos más importantes. Algunas cadenas han apostado por crear terrazas en las que disfrutar en todo momento de un buen cóctel (hace poco te contábamos las que triunfaban en Lisboa o Praga). Pero también hay las que están reservando algunos huecos para un producto mucho más sano y natural: la miel. O, más concretamente, para sus productoras: las abejas.

Así, son muchos los hoteles que se suman a la moda del Beekeeper, que no es otra cosa que la apicultura urbana llevada a los tejados de las grandes ciudades. Esto permite echar una mano a un animal que es vital para la conservación del ecosistema, al ser uno de los principales agentes polinizadores del planeta. Y es que las abejas nos necesitan, al igual que nosotros a ellas. Un intercambio en el que, además, salimos ganando, pues ellas nos enriquecen con su mejor fruto: la miel. Por cierto, que España es el principal productor de miel en la Unión Europea.

Empresas y hoteles se han puesto de acuerdo para crear miel. En París, por ejemplo, las grandes naves de oficinas de la firma Vente-Privee.com ya cuentan con sus diferentes colmenas, visibles desde los edificios que rodean a la sede de la empresa en el norte de la capital. Al mismo tiempo, cadenas hoteleras como Hilton o Fairmont han creado programas de apoyo. Esta segunda es la que más tiempo lleva implicada, ya que creó en 2008 su programa apícola.

Empezamos por ellos nuestro recorrido por siete hoteles en las que las abejas forman parte del personal.

1. Fairmont Empress
Situado en la piedra angular del puerto de Victoria, en la Columbia Británica (Canadá), es de los que cuenta con más panales. Se trata de un resort en la isla de Vancouver, con una arquitectura de principios del siglo XX y que destaca por su lujo frente al mar. Edredones de pluma de pato, teteras de diseño, albornoces de lino... Y arriba, abejas, 10 colonias con 50.000 miembros cada una que fabrican 317,5 kg. anuales.

2. Waldorf Astoria
En su azotea, con vistas a Park Avenue, están las abejas más afortunadas de Nueva York, pues viven en un piso 20 en pleno Manhattan. El hotel cuenta con 360.000 abejas que producen más de 136 kg. de miel al año. No solo se usa esta miel para que disfruten los clientes del hotel, sino también para crear cosméticos de lujo en el spa del hotel. Las abejas comparten espacio con el huerto del hotel.

3. Mandarin Oriental París
Más modesta es la cantidad de miel que se recoge en este cinco estrellas de la capital francesa: un total de 25 kg. Aquí las abejas viven en la rue Saint-Honoré, por lo que su miel es de las más ‘elegantes del mundo’. Comparten espacio con 138 habitaciones y 39 suites, así como algunos de los restaurantes más importantes de la ciudad.

4. Regent Varsovia
Fue el pionero en Europa, gracias a la iniciativa de la mujer de su director. Las colmenas están en la azotea, a la sombra, y la cosecha de miel es ofrecida a los huéspedes en el desayuno y acompañando los platos de la carta. Los clientes de las suites se llevan a casa una jarritas con miel como regalo.

5. Hotel InterContinental Praga
Desde la primavera de 2013, los clientes de este cinco estrellas pueden untar en su tostada miel elaborada en el propio establecimiento. Vuelan sobre todo a los jardines de Střesovice, Žižkov, Troja o Vinohrady, pero también a los de Josefov, Letná o la Ciudad Vieja, donde hay plantadas numerosas especies exógenas. Puede así decirse que por su curiosa mezcla de flores checas y extranjeras la miel de estas abejas es de carácter único.

Frascos de miel de limonero del The Westin. Berlín (Alemania).

6. The Westin Grand Hotel Berlin
Con colmenas en su techo desde 2010, las obreras consiguen el polén del propio Tiergarten y los jardines cercanos al Reichstag, ya que el hotel está en la esquina de Friedrichstrasse y el bulevar Unter den Linden. El hotel sirve en el desayuno la variedad de miel de limonero y vende los frascos por 5 euros.

7. Lancaster London
Con Hyde Park al sur y la City de Londres hacia el este, el hotel presume de tener las mejores vistas de la capital británica. Desde 2011 tiene colmenas en su techo, que es de donde procede la miel que se ofrece a los clientes. Por cierto, que cerca de allí tienen unas rivales de altura a la hora de coger el mejor polen: las abejas de la reina Isabel II, que Buckingham también tiene colmenas.