El restaurante del que todo el mundo habla

Chiltern Firehouse es, hoy por hoy, uno de los restaurantes más punteros de Londres. Un local que aúna elementos como una arquitectura única, patrimonio, diseño y un ambiente acogedor, elegante, vintage y glamoroso. Con esto decimos mucho pero no todo. Porque lo más importante es que ofrece una de las experiencias gastronómicas más especiales de la City, tanto, que hasta el ex primer ministro David Cameron ha pasado por aquí.

La que fuera una de las primeras estaciones de bomberos construida en Londres, que data de 1889, en hoy una elegante brasserie de estilo neoyorquino, restaurada con mimo, conservando los techos altos, decorada con elementos y accesorios de iluminación muy especiales, con grandes espejos en las paredes y una cocina a la vista de los clientes.

El edificio gótico victoriano es impresionante y se ha reconvertido en un hotel de lujo tremendamente original y en un restaurante mágico, punto de encuentro de la crème de la crème de la ciudad. Este es el último proyecto del magnate hotelero André Balazs en el barrio de Marylebone, y uno de los locales que no puedes dejar de visitar en tu próximo viaje a la capital de Reino Unido.

Porteros ataviados con sombreros de copa te llevarán a través de un bonito jardín hasta tu mesa sus mesas. El restaurante sirve cocina contemporánea, elaborada con ingredientes de calidad con un toque ligeramente americano. Su chef estrella, el portugués Nuno Mendes, ha creado para Chiltern Firehouse un menú de clásicos pero reinventados y con nuevos sabores  con énfasis en la estacionalidad y la alimentación saludable.

Podemos desayunar, por ejemplo, de lunes a viernes de 7 a 10.30 h., y los sábados y los domingos de 9 a 10h 30, zumos orgánicos, huevos escaldados o revueltos con calabacines, espinacas y parmesano, cestas de pastelería, crepes o Huevos Benedict sobre muffin de queso, jamón glaseado y salsa holandesa.
Comer de lunes a viernes por ejemplo Terrina de Foie Gras con nueces e higos, o Steak Tartare con piñones, chipotle y salsa picante de primer plato, y seguir con un bacalao confitado de la Isla de Wight con tomates, calabacín y aceitunas, o langosta, o pollo asado a la cazuela con apio, manzana y perifollo.

Las cenas se sirven de lunes a domingo hasta las 22.30 h. y las exquisiteces se suceden una detrás de otra en la carta. Gambas rojas con naranja, eneldo y pistacho, Ostras, Rape sobre una cama de hinojo y dulce de leche de setas, Pulpo gallego con berenjena, daikon y setas, Cordero de gales con chermoula, zanahoria y menta, o cerdo ibérico con calabacín, shiso y levaduras.

En Chiltern Firehouse siempre verás caras famosas. Kate Moss, Simon Cowell, Lindsay Lohan, los Beckham, Tony Blair, Guy Ritchie, Lily Allen, Bradley Cooper y Orlando Bloom, entre otros, han sido vistos recientemente allí, saboreando estas delicias. Así que, como puedes imaginar, hay que reservar con antelación. Y aunque no es muy barato, tampoco resulta excesivamente caro. Sin duda, en uno de los locales de moda en el que ver y dejarse ver en la capital.

Y el Chiltern Firehouse, en el corazón de Marylebone en Londres, forma parte de la colección de hoteles de lujo que incluyen el Chateau Marmont en los Ángeles, el famoso hotel Mercer en Nueva York y en temporada de playa el Sunset Beach en Shelter Island. Si quieres alojarte aquí, disponen de 26 habitaciones y suites elegantemente decoradas, con una o más chimeneas, y baños que conservan el encanto histórico del edificio. Serás atendido por un conserje personal, que te hará sentir como en tu propia casa. Todas con ventanas de suelo a techo, un gran sillón, armarios dobles y bebidas en una nevera personal.

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Chiltern Firehouse