Relajarse en una plantación de té

El té fue introducido en Sri Lanka en la época colonial por los británicos, y desde entonces, tomar el té forma parte de la rutina diaria de este pequeño país al sur de India. Una taza de té es sinónimo de hospitalidad, y en 98 Acres te ayudarán a conocer cómo es el proceso de cultivo, de recolección y de envasado de este producto tan querido por la cultura anglosajona.

Desde este alojamiento tan especial vas a poder acercarte al día a día de una plantación de la mano de un experto durante el proceso de desplume, lo que consiste en recolectar 'dos ​​hojas y un brote', y continuar con una visita a la fábrica para ver el proceso de marchitamiento y los pasos posteriores que intervienen en la fabricación del té fresco. Todo finalizando con una degustación de té en la fábrica y un cóctel de té o un plato delicado con té infusionado. Respirar el aroma del té fresco de la fábrica y aprender cómo preparar una buena taza de té de Ceilán forma parte de la experiencia de 98 Acres Resort & Spa.

El té de Ceilán es uno de los más reconocidos del mundo, y este país es uno de los mayores exportadores del mundo junto a India y Kenia. Aquí despertarás con impresionantes vistas de las montañas y de las plantaciones de té, en una región exuberante, hábitat natural de una increíble flora y fauna. En Sri Lanka el té de la tarde es toda una institución, así como relajarse y disfrutar de la paz y los sonidos de la naturaleza a tu alrededor.

La belleza y la serenidad de esta región montañosa es un must alojado con todas las comodidades de este maravilloso hotel boutique. 98 Acres Resort y Spa es un complejo integrado en el entorno, con un diseño de chalés con encanto construidos con materiales reciclados, con techos de paja 'Illuk' y de belleza rústica. El concepto y el diseño de este complejo es respetuoso con el medio ambiente. Chalets ubicados en el paisaje nivelado de la plantación, ideales para unas vacaciones tranquilas de relax, para recién casados e incluso para las familias.

Cada chalet se abre a las vistas panorámicas de las montañas brumosas y está equipado con todas las comodidades modernas que garantizan una estancia de lujo. Las habitaciones tienen suelos pulidos de madera y camas king size, y los baños están acabados en piedra rústica con una ducha de piedra tradicional independiente y una bañera de gran tamaño con agua caliente y fría. Todas las habitaciones tienen conexión Wi-Fi gratuita.

El Restaurante 98 sobre una loma con vistas al horizonte ofrece  una amplia variedad de platos que incluyen platos de Sri Lanka, delicias del Lejano Oriente y comida internacional. Y como no podía ser menos, las salsas elaboradas con té, son la especialidad.

A 5 minutos de distancia, cuentan con un helipuerto privado desde el que te recomendamos embarcar en uno de los paseos en helicóptero para disfrutar de Sri Lanka a vista de pájaro. Y para relajarte nada mejor que el Spa 98, donde se utilizan para los tratamientos hierbas y otros ingredientes de té y de otras plantas de la propia plantación. Un balneario en el que disfrutarás de la profesionalidad de los terapeutas arropado por la suave brisa, y con magníficas vistas sobre el valle.

Hay amplias opciones de senderismo, el monte sagrado Pico de Adán es una de las mayores atracciones turísticas de Ella y está a sólo cinco minutos de la estación desde la que se puede subir en media hora a la cima de 1.141 metros. También existe la roca de Ella, una subida más desafiante que dura aproximadamente tres horas, y muy cerca las Ravana Ella Falls, una de las caídas de agua más grandes de Sri Lanka y también cerca de Bambaragama Falls, la segunda cascada más alta de Sri Lanka.

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98 Acres Resort & Spa