Viajestic » Destinos

América Sur

Navegar por la Catedral de Mármol

En Patagonia se encuentran las cuevas de la Catedral de Mármol, un paraje único en la frontera entre Chile y Argentina.

Publicidad

Si se accede desde Chile, circulando por la impresionante Ruta Austral, habrá que dirigirse al lago General Carrera. Si lo hacemos desde Argentina, en cambio, tendremos que poner rumbo al lago Buenos Aires. En realidad, nos movemos al mismo lugar: la Catedral de Mármol, un paraje único en la Patagonia. Conocido por los indígenas como el lago 'de las tempestades', la erosión ha permitido que en este rincón del sur del continente se hayan formado una serie de cuevas cuya sedimentación, por un lado, le da un impresionante color azul y, por otro, lo ha veteado como si realmente se tratara de mármol (el efecto es el mismo). La belleza es tal que no tardaron en bautizarlas con apelativos como 'catedral' o 'capilla'. Hay diferentes tonos de color, dependiendo de las impurezas en los contenidos. Las zonas blancas son las de mayor pureza, pero también es posible encontrar bancos de mármol azul y rosa debido a la presencia de otros minerales. Para poder visitarlas, lo más sencillo es alquilar un káyak en alguno de los puestos que bordean el lugar, ya sea en la orilla de un país o en el del otro. Nada como adentrarse en el laberinto de cuevas, pasadizos, caminos, grutas que el paisaje ha formado en el General Carrera (lago de de 1.850 kilómetros cuadrados de superficie, origen glaciar y rodeado por la cordillera de los Andes que desagua en el Pacífico a través del río Baker). Las excursiones zarpan desde las localidades de Río Tranquilo, Chile Chico y Puerto Guadal, situadas algo alejadas del aeropuerto más cercano, el de Balmaceda, a tres horas en coche y a través de carreteras no pavimentadas en su mayor parte. Bastan 10 minutos de navegación por las aguas frías y turquesas para llegar al macizo de las grutas. Por cierto, que el puerto de Río Tranquilo es el inicio del futuro camino terrestre hacia Bahía de Exploradores, entrada a Puerto Grosse y los hielos milenarios de la laguna de San Rafael. Pero esa es otra aventura, ahora dejémonos llevar por la 'catedral' más singular...

Publicidad