Viajestic» Destinos

ISLAS GRIEGAS

Milos, la isla de Venus, está en las Cícladas

Si buscas un destino de escándalo no desconocido pero tampoco masificado toma buena nota de este: la isla griega de Milos, en las Cícladas.

-Milos

MilosImagen de Kostas Limitsios en Flickr, licencia: CC BY 2.0

Publicidad

¿Quién no querría pasar unos días de verano en la isla de Venus? es Milos, así conocida porque allí se encontró la espectacular escultura de Venus (llamada por ello la Venus de Milo) aunque no se te ocurra ponerte a buscarla ahora por la isla, está en el Museo del Louvre, en París. Se trata de un antiguo volcán que ha visto su cráter invadido por el mar creando una costa llena de espectaculares formaciones geológicas.

Playa en la isla de Milos
Playa en la isla de Milos | Pixabay

Lo más atractivo de Milos son sus costas, sus grutas y sus playas, las hay para todos los gustos: playas tan espectaculares como la de Sarakiniko, una playa de roca blanca sin rastro de arena u otras mucho más extensas, arenosas y paseables como la playa de Firiplaka, calas como la de Tsigrado y grutas y cuevas inaccesibles desde tierra pero no desde el mar, en Adamas podrás contratar un crucero para descubrirlas desde el mar.

Sarakiniko
Sarakiniko | Pxfuel

Claro que no todo van a ser playas, aunque en Milos hay más de 70: aquí descubrirás un importante museo arqueológico en el que desquitarte por aquello de perderte a la Venus porque cuenta con una réplica de la maravillosa estatua de Afrodita localizada en esta isla allá por el S.XIX; también podrás visitar un antiguo anfiteatro y las catacumbas de Milos.

¿Qué más podrás descubrir en Milos? sus vinos y sus naranjas, también sus aceitunas y por supuesto sus piedras porque la minería es una de las actividades económicas más importantes de la isla, pueblos realmente hermosos como Adamas, Pollonia y por supuesto Plaka además de una deliciosa propuesta gastronómica.

Milos
Milos | Pixabay

¿Y cómo llegas a Milos? volando desde Atenas o en barco desde otras islas de las Cícladas como Santorini.

Publicidad