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Europa

Dormir en la casa de Papá Noel

En el resort Kakslauttanen, entre los inolvidables bosques de la Laponia finlandesa

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La noche del 24 de diciembre, nochebuena, es inolvidable. Una noche especial en la que las familias se reúnen, celebran, brindan, sonríen y cuentan anécdotas. Durante varias horas se comparten platos exquisitos, se saborean recetas hechas con cariño y se planean momentos que aún están por llegar. Las sobremesas se alargan, a veces se toma más dulce de la cuenta y siempre se termina el día con una sonrisa. Aunque según se va acercando la medianoche y el sueño comienza a aparecer, surge la impaciencia de saber que Papá Noel ya estará subido en su trineo, con sus renos repartiendo regalos chimenea a chimenea, país a país, y que puede estar a punto de llegar a nuestra casa. Por eso la noche del 24 es especialmente familiar y cada año la esperamos con ganas e ilusión. Tras muchos años, Papá Noel ha querido abrir al público su casa. Un alojamiento único situado en Finlandia en el que familias, parejas y grupos de amigos pueden quedarse durante unas noches para disfrutar del espíritu más intenso de la Navidad. Santa Claus, como se le conoce en otros países, tiene una casa de lo más acogedora y ahora, por suerte, podemos alojarnos en ella. Si estás buscando un plan especial para estas fechas, una experiencia inolvidable rodeado de nieve y magia, sin duda alojarte en el Kakslauttanen Santa's Home será tu mejor opción. Kakslauttanen, que ya cuenta con un hotel en forma de iglús de cristal, tiene también esta zona para que aquellos que más disfruten la Navidad puedan sumergirse en todo el universo de Santa. La casa se encuentra en el corazón del bosque, iluminada de una manera inconfundible. Y justo al lado hay un espacio en el que Santa Claus recibe a lo niños, siempre con cita previa no sea que haya decidido salir a repartir regalos. Se encuentra al final de un puente de madera que atraviesa un río completamente helado en esta época del año, lo que convierte el paisaje en un lugar más propio de un cuento que de la vida real. La casa de Santa tiene un gran salón con una capacidad para 250 personas, en el que se pueden celebrar cenas especiales, bodas o incluso disfrutar de un concierto. Además, desde la Casa de Santa se pueden contratar excursiones tan apetecibles como esquí de fondo, pesca en el hielo, paseos para ver auroras boreales, trineos tirados por perros o por renos. El resort ártico de Kakslauttanen es un lugar único en el mundo, en el que hasta el propio Papá Noel encuentra la calma necesaria, rodeado de paisajes infinitos, animales salvajes y una decoración navideña durante todo el año para vivir tranquilamente. Está situado a 250 kilómetros al norte del Círculo Polar Ýrtico, en la Laponia finlandesa, y el aeropuerto más cercano está en Ivalo, a solo 30 minutos de distancia del hotel y bien conectado con Helsinki por la compañía aérea Finnair; aunque la localidad no se encuentra tampoco muy lejos del norte de Noruega.

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