ALEMANIA
Descubre Núremberg y su Christkindlesmarkt, uno de los más míticos de Alemania
Nuremberg celebra ya la nostalgia que deja siempre su espectacular mercado de Navidad.

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En Europa hay multitud de mercadillos navideños en los que los paseos de diciembre se tornan de lo más especiales. Las casitas de madera, las luces, los adornos y los villancicos lo inundan todo y el ambiente es tan cálido y agradable que se olvidan hasta las bajas temperaturas. Eso es precisamente lo que ocurre en el Christkindlesmarkt, el que es uno de los mercadillos de Navidad más antiguos y famosos del continente. Se celebra en Núremberg y en él no faltan la música ni los aromas.
Situada en el corazón de Baviera, esta ciudad es histórica y tiene un casco medieval precioso que gana todavía más belleza, si es que eso es posible, en Navidad. Pero si hay algo que destaca en esta ciudad durante las últimas semanas del año es su mercadillo, que se celebra en la Hauptmarkt, la plaza central.
Su origen se remonta al menos al siglo XVII, momento en que se tienen los primeros registros de su existencia. Por eso el Christkindlesmarkt es también sinónimo de tradición. Casetas, decorados de telas rojas y blancas, sabores y olores se entremezclan en un mercadillo que siempre se inaugura con un discurso solemne del Christkind. Si te preguntas quién es, se trata de una figura simbólica que se viste de dorado, que representa al Niño Jesús y que es todo un símbolo de Núremberg.

Más allá de esto, cabe destacar la estética tradicional de este precioso mercadillo navideño que año tras año recibe la visita de miles de locales y viajeros. Y es que no hay quien se resista a su ambiente auténtico y familiar y, una vez allí, tampoco a comprar algún producto artesanal, un adorno navideño hecho a mano o un regalo típico de la región.
Por supuesto, en el Christkindlesmarkt también hay hueco para la gastronomía. Sin duda alguna, degustar alguna delicia de la zona es parte de la experiencia. Desde las famosas salchichas Nürnberger Rostbratwürste, pasando por el vino caliente especiado Glühwein o las galletas Lebkuchen, las posibilidades son varias y todas ellas están riquísimas.
El mercadillo está montado, normalmente, desde finales de noviembre y hasta Nochebuena. Así que si esta Navidad no has contemplado Núremberg como opción para tu escapada invernal, quizá quieras hacerlo de cara al próximo año. Te adelantamos algo: el casco histórico de esta ciudad amurallada ya es suficiente para conquistarte, así que imagínate si a eso le sumas un mercadillo tradicional precioso.
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