Europa
Covent Garden, un barrio imprescindible
Este icono británico es un lugar pintoresco, bohemio y lleno de sorpresas
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Uno no puede viajar a Londres e irse sin ver algunos de sus iconos como son el Big Ben, Trafalgar Square, la Torre de Londres, el mercado de Portobello, el Tower Bridge y, por supuesto, Covent Garden. Cada barrio en Londres es un mundo, pasear por sus calles exige una concentración especial a los detalles, porque la capital británica es brillante a cada paso. Todas las zonas tienen su particular encanto pero hay una que encandila sin dudar a todos sus visitantes. Hablamos de Covent Garden, una de las visitas imprescindibles y uno de los rincones más pintorescos y bohemios de la ciudad. Está repleto de cafeterías, tiendas, galerías de arte, puestos en la calle y artistas callejeros que captan la atención de cualquiera que pase a su lado. Por supuesto, la parte más conocida del barrio y la que congrega a más turistas es el Mercado de Covent Garden. Este lugar abrió sus puertas en 1835 y anteriormente el terreno donde se sitúa era un jardín del Convento de San Pedro, en donde se cultivaban todo tipo de verduras para el sustento de los monjes. Tras los monjes de Westminster, el lugar pasó a ser propiedad de los condes de Bedford, quienes lo convirtieron en una plaza pública. Ya en 1660 aquí existía un mercado de flores, frutas y verduras y posteriormente, dos siglos después, se construyeron los pabellones cubiertos que luego fueron rehabilitados en 1974 y que podemos ver hoy en día. Su estructura metálica, con varios pasadizos, tiendas de todo tipo, restaurantes y cafeterías, son una buena distracción para pasar una mañana entera o visitarlo a última hora. El recorrido debe centrarse en Floral Street, donde se concentran la mayoría de tiendas, restaurantes y pubs para cenar o tomar una cerveza. Mientras que aquellos que tengan ganas de hacer turismo de museos, también tienen la posibilidad en Covent Garden. El Museo de Transporte se encuentra en el interior de un edificio victoriano justo al lado del mercado. Hace un repaso por la historia del transporte en todo el Reino Unido, mostrando la evolución e incluso aventurándose a prever el futuro. El Museo del Teatro, ubicado en Tavistock Street, muestra una gran selección de objetos relacionados con el teatro. Carteles, cuadros de actores, vestuario original, atrezzo y escenarios enteros de obras de teatro que han tenido lugar en la capital. Prestando atención al contenido de sus vitrinas se puede conocer la historia del teatro en Londres desde la época isabelina hasta la actualidad. En la Royal Opera House, sede de la compañía real de ópera y el ballet real de Inglaterra, se puede acudir a alguna de las representaciones de su programación o también visitar. El actual es el tercer teatro que ocupa este mismo espacio y fue construido en 1856, aunque casi todos los elementos que lo componen fueron reconstruidos en 1990. En definitiva, Covent Garden es un lugar imprescindible, tanto para londinenses como para turistas. Un lugar para sentirse como en casa y en el que siempre hay cosas que sorprenden, por muchas veces que se haya visitado. Además, este mes de octubre cuenta con una nueva atracción. Se trata de una escultura del artista británico Alex Chinneck que representa un edificio de 12 metros roto en dos. La ilusión óptica es impactante ya que parece que está flotando sobre el aire. Digno de fotografiar y admirar en directo.
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