Museo del orinal. Ciudad Rodrigo. (Salamanca)

¡Sí! Han oído bien. En Ciudad Rodrigo existe un museo destinado a ese objeto que tan útil fue a lo largo de los siglos; antes de que los inodoros se instalasen en nuestras vidas para no abandonarnos y antes de que tener aseos privados en las casas fuera un hecho normalizado.

Se encuentra en el edificio del Seminario Diocesano de San Cayetano, junto a la catedral de Ciudad Rodrigo. Fue inaugurado en 2006, gracias a la labor de un coleccionista particular: José María Del Arco Ortiz. La muestra alberga más de 1.300 piezas diferentes de más de 27 nacionalidades: orinales para hombre, para mujer, para viajar, adornados con lujo, humildes orinales… Un sinfín de recipientes que se utilizaron a través de las distintas épocas y los distintos países, un objeto que utilizaban por igual las clases acomodadas y los ciudadanos de a pie; pero cómo en todo hay clases.

Museo del sexo de Ámsterdam

Se encuentra en la calle Damrak, 18; muy cerca de la Estación Central dela ciudad. Su peculiaridad es que es el museo del sexo más antiguo del mundo y todos los años lo visitan más de 500.000 personas -han de ser mayores de 16 años-. Recoge toda una colección de estatuas, cuadros, fotografías y objetos que se relacionan con el sexo. El lema del museo es: “el sexo es lo más natural del mundo”; y con esta naturalidad, nos muestran todo lo relacionado con las relaciones eróticas y la sensualidad. Encontraremos sorprendentes esculturas y accesorios que se han utilizado a lo largo de los siglos en los distintos países.

Museo de las Brujas | Museo de las Brujas

Museo de las Brujas. Zugarramurdi. (Navarra)

La Inquisición hizo de las suyas en este pueblo navarro; haciendo a este pueblo tristemente famoso –existe incluso una película de Alex de la Iglesia inspirado en este mito-. El origen de este episodio proviene del relato de una joven del pueblo acerca de sus sueños, en los que decía volar y haber visto a varias personas del pueblo participando en Akelarres. La Inquisición intervino y 54 personas fueron encarceladas acusadas de practicar la brujería; la mayoría de ellos murió en prisión o durante los traslados. El 7 de noviembre de 1610, mediante un Auto de Fe: 21 personas fueron exculpadas, 21 acusados de delitos menores y 11 fueron condenados en la hoguera –algunos vivos y otros en esfinge-, sido quemados en la hoguera en un acto público.

Las autoridades del pueblo han querido recordar con este museo lo que sucedió en Zugarramurdi y las circunstancias religiosas y sociales de esta triste época. El museo se alberga en un antiguo hospital con salida a las cuevas y en ella se muestran objetos de la época, contextualizados en su entorno. Un homenaje a los hombres y mujeres injustamente ajusticiados, acusados de cosas inverosímiles y, finalmente, quemados en la hoguera.

El museo del falo de Reykjavík. (Islandia)

Este museo se caracteriza por tener la mayor colección de penes de distintas especies. El museo tiene más de 280 piezas expuestas, bien como trofeos de caza, embalsamados, en formol o disecados. El objeto de esta colección es tener los penes de todos los mamíferos de Islandia y de alguna de las especies que se encuentran en peligro de extinción, aunque no sean de Islandia. En 2011 el museo obtuvo el primer ejemplar de pene de un homo sapiens, fue donado por Paul Arason (un amigo del director del museo).

También podemos encontrar obras artísticas relacionadas con los falos y representaciones artísticas da animales y criaturas mitológicas (elfos, troles o monstruos marinos).

Museo del Crimen y Castigo | Museo del Crimen y Castigo

El Museo del Crimen y Castigo . (Washington D.C., EEUU)

Este museo privado se inauguró en 2008 está dedicado a la historia de la criminología en Estados Unidos. A lo largo de sus 2.600 metros cuadrados, podemos encontrar muestras del crimen colonial, de forajidos del salvaje oeste, gánsteres de la mafia, asesinos en serie y delincuentes de cuello blanco. El coche en el que fueron tiroteados y detenidos Bonnie and Clyde o el Wolsvagen del asesino en serie Ted Bunny -famoso por asesinar a más de 30 jóvenes-, se encuentran entre los objetos exhibidos.

Encontraremos una recreación de una “escena del crimen” donde se ha producido un asesinato y los visitantes son guiados a la resolución del crimen a través de las técnicas de ciencias forenses: pruebas de balística, análisis de sangre, de huellas dactilares y reconstrucción dental y facial.

Y también hay una Sala de Castigo, donde podemos encontrar la recreación de una cámara de guillotina, una auténtica máquina de inyección letal y una silla eléctrica de una prisión de Tennessee. Todo crimen tiene su castigo según este museo.