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Europa

Annecy, la Venecia de los Alpes

Una ciudad medieval con canales de aguas cristalinas

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En el norte de los Alpes franceses, la ciudad de Annecy es una bella localidad que descansa a orillas de un hermoso lago de aguas cristalinas y que ocupa una posición estratégica sobre los ejes transversales entre Italia, Ginebra y Francia. Su centro medieval construido en torno a un castillo del siglo XII, está rodeado de pequeños canales y arroyos de agua limpia, fresca y de un color azul maravilloso, que proviene del lago del mismo nombre. El centro histórico es recorrido en su mayor parte por el canal Thiou y está repleto de pequeñas calles atravesadas por canales. Y este toque tan especial, y el hecho de ser la prefectura del departamento de Haute-Savoile, le han valido el apodo de la Venecia de Saboya. La ciudad, la más antigua de los Alpes franceses, acoge una industria de alta tecnología muy activa y es un gran centro turístico. Todos los años, a principios de junio, es la sede del Festival de Cine de Animación más importante de Europa y celebra un mercado internacional en el que se reunen más de 7.000 profesionales del sector. Conocida mundialmente por su atractivo turístico, su calidad de vida y sus preciosas montañas, Annecy ha sabido conservar su encanto histórico y su espíritu medieval a lo largo de los años. El Lago de Annecy es el eje central de la población, y es segundo lago natural más grande del país galo. Se puede navegar por sus aguas en alguno de los barcos que organizan recorridos y es una excelente manera de descubrir la belleza de la ciudad. Pero también Annecy, es perfecta para perderse por sus bellos rincones. Es un poco como pasear por Venecia, hay que ir descubriendo sus tesoros sin prisa. El Palacio de l’Isle es uno de los símbolos de Annecy y probablemente uno de los monumentos más fotografiados de Francia. Es un castillo ubicado en el centro del canal Thiou, que data de 1132, y tiene una curiosas forma triangular. Fue residencia del Señor de Annecy en el siglo XII pero desde la Edad Media hasta el año 1865, se convirtió en una cárcel, y también se utilizó como tal durante la Segunda Guerra Mundial. Es Monumento Histórico desde 1900 y hoy es un museo de historia local que merece la pena visitar para conocer un poco más de cómo era la vida antaño. Otro de sus atractivos turísticos es el Castillo de Annecy, en la ciudad vieja, construido en el siglo XII como residencia de los condes de Ginebra, una impresionante fortaleza situada en el centro histórico y que domina la ciudad. Hoy Museo y Conservatorio de Arte e Historia de Annecy y Oficina Regional de los Lagos Alpinos. Pasear por la ciudad desde el Pont Albert-Lebrun y siguiendo por la Promenade Jacquet a lo largo del canal del Vassé, o cruzar Puente de los Amores, Pont des Amours,  el puente más romántico, y del que se cuenta que si dos enamorados se besan en su tramo central, permanecerán juntos para toda la vida. Pasar entre la escuela Jules-Philippe y el ayuntamiento para llegar a la iglesia de Saint Maurice, el canal Saint-Dominique, llegar a Quai Perrière, desde donde se pueden ver las compuertas mecánicas que cierran la entrada del canal Saint-Dominique. Río arriba, desde el Palais de l'Ile se contempla la vista más curiosa del casco viejo. La ciudad de Annecy es un destino perfecto para una escapada como el puente de mayo que se avecina. Es fácil de recorrer y el lago permite un montón de actividades como dar una vuelta en bicicleta. Se alquilan allí mismo, alquilar ebarcaciones de pedal, de motor o paseos en barcos turísticos con comida y bebida incluida. Hacer parapente es otra de las actividades que se recomiendan en la zona. La vista impresionante de la ciudad, del lago natural, las montanas y las construcciones medievales te dejaran sin aliento. Además ahora en primavera puedes disfrutar de la ciudad vieja y de sus canales adornados con cientos de flores.

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