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Escapada a Escocia

La isla de Skye, una Escocia en miniatura

En la isla de Skye encontrarás todos esos elementos que caracterizan a la propia Escocia; es una especie de pequeña Escocia que te dejará muy satisfecho si solo puedes pasar unos días en el país. Conoce sus lugares más destacados.

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¿Qué aterriza en tu cabeza cuando piensas en Escocia? Seguramente, el Lago Ness. Más lagos. Castillos de cuento y más castillos. Las Tierras Altas, que a veces se nos antojan algo desconocidas. Pequeños pueblos aún más desconocidos, todos ellos con un encanto particular. Leyendas. Más castillos. Más lagos. Una historia apasionante y una cultura muy marcada que ha interesado siempre a millones de personas.

Conocer Escocia en unos días es más que complicado: es imposible. Ni siquiera tienes que planteártelo. Pero sí es cierto que existe una pequeña región que parece ofrecer una versión 'mini' del país y que puedes visitar al completo en poco más de tres días. La isla de Skye, como así se llama el lugar del que os hablamos, es una especie de Escocia en miniatura que nos ofrece un poco de todo lo que presumiblemente buscamos en el país.

Situada en la costa noroeste, en las Islas Hébridas, y con una población que no supera los 10.000 habitantes, la isla de Skye tiene rincones en los que perderse durante horas. Una variedad de paisajes nos da la bienvenida y comprendemos desde el primer momento que nos es posible caminar bordeando el mar por acantilados imposibles para minutos después perdernos en unas recónditas montañas que parecen no haber sido descubiertas por completo.

Podemos comenzar nuestra ruta por Skye en Portree, el pueblo que domina la zona. Es pequeño, pesquero, con casitas de colores y un mirador establecido en una colina que nos permite obtener una vista completa del lugar. Un perfecto ejemplo de los pueblos escoceses de los que hablábamos al principio.

Hacia el Norte, bordeando siempre el mar, encontramos los acantilados Kilt Rock, que guardan una de las joyas de la isla: la cascada Mealt Waterfall, de 60 metros de altura, cuyas aguas dan directamente al mar y que, dicen, se asemeja a los pliegues de la típica falda escocesa (es decir, el kilt).

Varios de los paisajes más espectaculares de la isla los encontremos en el Norte, sobre todo en la zona de Quiraing. La expresión 'capricho de la naturaleza' cobra todo su sentido al contemplar las construcciones rocosas del lugar, siempre rodeado de un intenso verde que puede incluso abrumarte y que te hará sentir protagonista de tu película favorita de fantasía.

La guinda del paste es el famoso Old Man of Storr, quizá el lugar más conocido de Skye. El gran tamaño de las rocas y el lugar donde se encuentran consiguen que pocas cosas igualen la sensación de sentirse a sus pies, con vistas impresionantes. Eso sí, prepárate para andar o no conseguirás disfrutar al cien por cien del momento.

Para quien busque leyendas, Skye no está libre de ellas. Se dice en un recóndito valle cerca de Uig, en la parte noroeste de la isla, encontraremos el lugar donde habitan las hadas. La paz que se respira entre sus colinas y la sensación de creerte esa afirmación en el momento en que pisas el lugar lo convierten en un imprescindible.

Más leyendas, en esta ocasión unidas a castillos. El Castillo de Dunvegan es una fortaleza de estilo normando que perteneció al clan MacLeod. En su poder, según la historia y para su propio orgullo, tenían la bandera de las hadas, una bandera de seda amarilla que fue donada por un hada a la familia. Representa la esperanza y la defensa contra los peligros. Si esta historia no te convence, al menos podrás disfrutar de un bonito castillo y todos los elementos típicos escoceses -más montañas, más verde y más mar.

Continuamos nuestro descenso hacia el sur y lo hacemos deteniéndonos en Neist Point, donde nos espera un faro custodiado por un hermoso sendero. Desde el faro, uno de los puntos más populares de toda Escocia, las vistas de los acantilados de la zona son impresionantes.

Y llegaríamos a los montes Cuillin y las Red Hills, en el sur de la Isla. Todo en esta zona es impresionante pero, si queréis deteneros en un punto concreto, buscad el Lago Coruisk. Se encuentra en pleno corazón de la cadena montañosa más importante de la isla y, aun así, desemboca directamente en el mar.

Por último, sabed que del mismo modo que las hadas tienen su lugar de residencia, en el Norte, poseen también piscinas. En los montes Cuillin, una ruta de cascadas va formando piscinas de un azul cristalino que son conocidas como 'Fairy Pools', las piscinas de las hadas. Más leyendas, más paisajes que te roban el aliento, más naturaleza en estado puro, más Escocia. La Isla de Skye no va a defraudarte.

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