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CHINA INSÓLITA

Houtou Wan, el pueblo pesquero que se tragó la naturaleza

Una vez que el pueblo fue abandonado, junto al mar pero también al lado de una frondosa vegetación, esta fue colonizando poco a poco las casas hasta convertirlas en un paisaje insólito en el mundo.

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La villa de Houtou Wan era un tranquilo pueblo de pescadores de China que, poco a poco, por el desarrollo del transporte marítimo, el turismo y la pujanza económica de los astilleros cercanos, se fue abandonando. Se encuentra en la isla de Gouqi, una de las casi 400 que forman el archipiélago de las islas Shengsi, en el Zhoushan y cerca de la bahía de Hangzhou, es decir, el mayor archipiélago de China.

Pero si hoy es noticia este pequeño pueblo no es por su abandono en sí, pues ha corrido la misma suerte que otros muchos pequeños pueblos dedicados a la pesca y a la agricultura en el Gigante Asiático, sino por lo que ha pasado tras la marcha de sus habitantes. Y es que ahora la villa de Houtou Wan es uno de los lugares más pintorescos de la Tierra.

Todo porque la naturaleza se ha encargado de convertirlo en un lugar único. La villa, demás de junto al mar, se encontraba al lado de una de las selvas frondosas de esta zona tropical de China. El resultado es que, sin una mano del hombre para contener su crecimiento, la vegetación ha ido colonizando poco a poco las casas, tanto las paredes como los tejados y los interiores de los espacios. El resultado, la urbe más verde del planeta, aunque prácticamente sin ningún habitante (solo unos pocos ancianos quedan de la población de hace décadas).

Allí todo es de un espectacular color esmeralda, como si el jardinero más concienzudo se hubiera puesto a crear, ex profeso, una serie infinita de enredaderas por todas las calles. Y, sin saberlo, la Madre Naturaleza ha dado una nueva vida a Gouqi, pues ahora, gracias a este nuevo aspecto, empiezan a llegar en barco turistas de todo el país, que atracan en el viejo puerto y tratan de pasear por lo que sería un parque temático original y obra vegetal.

Los más encantados con todo el revuelo turístico son, precisamente, los ancianos, ya que ahora se dedican a charlar con los turistas que llegan, muchos de ellos deseosos de saber cómo era la vida allí antes y que quieren oír todas sus historias, compartiendo con ellos una taza de té.

Una buena idea para aprovechar aun más el viaje hasta esta curiosa villa de pescadores es continuar el trayecto por el archipiélago de las Shengsi. Es una de las zonas más bonitas de la costa china, cuidada medioambientalmente. Sus acantilados recuerdan a los de Irlanda por su altitud y belleza, contrastando con la vegetación. Para muchos, es toda una burbuja de oxígeno, de ahí que no sean pocas las rutas de senderismo que se han creado a lo largo de sus islas, así como miradores sobre el océano. Toda una preciosidad.

El modo más fácil de acercarse hasta la villa de Houtou Wan es tomando un barco turístico desde Shanghai o desde Hangzhou. No están demasiado alejadas, por lo que es perfecto para una excursión de un día.

Más información:
Turismo de China

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