TecnoXplora » Redes Sociales

SEGÚN UN ESTUDIO DE TRES UNIVERSIDADES DE EE UU

Hacer fotos en Instagram de comida y compartirlo hace que sea más apetitosa

De un tiempo a esta parte el tema gastronómico se ha revalorizado. Ahora ya no mola decir que comes de cadenas de comida rápida (afortunadamente). Lo que se lleva es decir que te comes tus propias esferificaciones o que el aguardiente que bebes es de fabricación casera.

Instagram

Instagram Ida Skivenes

Publicidad

Programas de arte culinario como Top Chef han logrado sacar el cocinillas que muchos llevamos dentro y nos han enseñado que comer bien es más que necesario. Y además divertido. Junto a este resurgir del interés por la cocina se han unido las redes sociales que favorecen que nos sintamos especialmente orgullosos de aquellos platos que nos salen medio comestibles.

Un ejemplo de ello es Instagram, la red social que triunfa entre los foodies. ¿Cuántos platos ves al día entre sus millones de fotografías? Seguro que muchos. Pues bien, la psicología se esconde detrás de este aluvión de apetitosas imágenes.

Según asegura un estudio realizado por investigadores de las universidades Saint Joseph de Philadelphia y San Diego fotografiar un plato de comida, no solo retrasa su ingesta, sino que también incrementa la sensación de disfrute asociada al consumo placentero de algunos alimentos. Exacto, fotografiar lo que nos vamos a meter entre pecho y espalda hace que el plato nos sepa mejor.

Esto se explica en la expectativa que genera y el tiempo de espera hasta que nos comemos lo que tenemos por delante. Incluso ocurre en alimentos menos apetitosos. Vamos que si fotografías un brócoli y esperas un poco es posible que te sepa a langosta.

Los resultados pueden ser de gran ayuda para aquellos que, ya de cara al verano, quieren comenzar con la dieta. Con tan solo hacer algunas fotografías a su comida “light”, esta les puede resultar más sabrosa. O al menos, psicológicamente.

Este estudio, además, iba asociado a otra investigación que puso de manifiesto que observar tendencias alimenticias en redes sociales como Instagram puede influir en la dieta y hacer que los usuarios se decanten por unos u otros alimentos en función de lo que ve en las redes. Así que lo ideal sería fotografiar productos sanos para «contagiar» a nuestros seguidores de buenos hábitos en la mesa.

Eso sí, tendrás que saber aplicar el filtro correcto porque hay fotografías de platos que quitan las ganas de hincarles el diente.

Publicidad