Redes sociales
Facebook cambia su nombre por "Meta" y nos muestra su metaverso
La ex Facebook busca dejar atrás la gran crisis de reputación sufrida en los últimos años
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Hace una semana conocimos que Facebook iba a dar un giro de 180 grados a su estrategia empresarial, comenzando por la comunicación. Ya entonces anunció que iba a cambiar su nombre, y así ha sido, ayer Mark Zuckerberg anunció que Facebook, el grupo de empresas, pasará a denominarse “Meta” un nombre que está estrechamente ligado a ese metaverso, del que también ha hablado y que nos ha adelantado cómo será este lugar o ente en el que se convertirá Internet en el futuro, al menos eso es lo que imagina su visionario creador, que entre otras cosas busca que su grupo de empresas se deshaga de la mala reputación cosechada por la red social en los últimos años.
Apuesta total por el nuevo metaverso
De esta forma, como en su momento hizo Google cambiando el nombre de su grupo de empresas a Alphabet, el grupo Facebook pasa a llamarse Meta, mientras que el resto de enseñas de la marca conserva su nombre, tanto la red social Facebook, como WhatsApp e Instagram. Por tanto, el cambio afecta sobre todo a la empresa que cotiza en bolsa y a la que al fin y al cabo gestiona todas las divisiones del negocio de Mark Zuckerberg. El anuncio del cambio de nombre ha venido acompañado sobre todo por lo que se entiende que será el futuro de las redes sociales e Internet en su conjunto, el metaverso avanzado ya desde hace años.
Y la verdad que es un concepto algo difuso de lo que deberán ser las redes sociales e Internet en el futuro, porque, aunque en la presentación se han mostrado ejemplos prácticos de lo que supondrá esta nueva plataforma, no nos queda muy claro en realidad qué es lo que nos va a ofrecer. Básicamente es una evolución de conceptos como aquel “Second Life” de comienzos de siglo, en el que las personas tenían un avatar dentro de un universo virtual paralelo, donde desarrollaban una segunda vida. Esa es la esencia del metaverso, pero con unas implicaciones y unos desarrollos de inteligencia artificial y realidad aumentada que a día de hoy escapan a nuestro razonamiento.
Podrás hablar con cualquier persona al otro lado del mundo como si la tuvieras delante, a través de este metaverso, jugando partidas de ajedrez con un holograma, por ejemplo. Básicamente es llevar su red social a un lugar indeterminado de la red, un mundo paralelo al nuestro que por otro lado sea tangible, entendemos que a través de los dispositivos de realidad aumentada que Facebook será capaz de vendernos en el futuro. Así que Facebook sigue viva, tal y como la hemos conocido siempre, solo que limitada a la red social, hay que dar la bienvenida a Meta, una apuesta arriesgada por un campo, el de lo virtual, que no acaba de arrancar.
Y seguramente no lo hace porque no existe la tecnología necesaria para hacer cómoda la interacción virtual con otras personas, lugares y mundos. Ese es el verdadero reto que tiene por delante Meta para que su apuesta por el Metaverso alcance esos mil millones de usuarios que esperan para el año 2024.
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