TecnoXplora » Internet

MANTÉN TU ACTIVIDAD A SALVO DE OJOS CURIOSOS

¿Cómo podemos mejorar nuestra privacidad en Facebook?

Cada día se conectan a Facebook millones de usuarios de todo el mundo que comparten enlaces, vídeos o fotos, a veces demasiado personales, que pueden terminar mostrando mucha más información de nosotros de lo que, quizás, nos gustaría. Mejorar nuestra privacidad en Facebook es algo que está a nuestro alcance; no es necesario dejar de usar Facebook, solamente tenemos que dedicar unos minutos y realizar unos sencillos ajustes.

La red social tiene un problema con los más jóvenes

La red social tiene un problema con los más jóvenes TecnoXplora

Publicidad

Hay que reconocer que Facebook se ha convertido en la “reina de las redes sociales”; un lugar capaz de conectar a millones de usuarios de todo el mundo en el que, a veces, nos exponemos más de la cuenta. Es cierto que Facebook no ofrece las cosas de manera muy intuitiva, pero la información que compartimos o quién tiene acceso a ésta es algo de lo que somos 100% responsables.

Con la idea de mitigar esa sensación de “estar expuestos” en Facebook y tener mayor control sobre las publicaciones que hacemos (y quién puede leerlas), os proponemos que invirtáis unos minutos en ajustar las opciones de privacidad de vuestro perfil de Facebook y, además, uséis algunos de los recursos que la red social de Mark Zuckerberg que nos ofrece para mantener vuestros datos a salvo de ojos curiosos.

Privacidad en Facebook

El primer paso para optimizar la privacidad de nuestro perfil en Facebook pasa por gestionar adecuadamente nuestros “amigos”. Hay que reconocer que la plataforma ha deformado un poco el significado de la palabra “amigo” y, muchas veces, acabamos agregando a nuestros contactos amigos, conocidos o compañeros del trabajo, y no siempre tenemos el mismo nivel de confianza con todos ellos.

Si accedemos a nuestra lista de amigos, algo que tenemos accesible desde nuestro perfil, podremos clasificarlos entre “mejores amigos”, “amigos” o “conocidos” que son las opciones que Facebook nos ofrece. Sin embargo, también tenemos la opción de mejorar estas agrupaciones creando listas adicionales que nos permitan una clasificación algo más granular.

¿Y qué listas podemos crear con nuestros contactos? Una buena clasificación podría ser “mejores amigos”, “familia”, “amigos”, “conocidos”, “compañeros de trabajo” y, por ejemplo, “visibilidad restringida” donde podríamos añadir a esos usuarios que terminamos agregando a nuestra red casi por compromiso y que, además, no queremos que tengan demasiado acceso a lo que hacemos.

Dedicar unos minutos a clasificar nuestros contactos es una inversión importante: es una tarea que nos servirá de base para ajustar la visibilidad de nuestras publicaciones, fotos o, incluso, la información de nuestro perfil.

Tras este ajuste, el siguiente paso es la configuración de las opciones de privacidad de nuestra cuenta.

Dentro de las opciones de privacidad que Facebook nos ofrece, podremos controlar, principalmente, qué usuarios pueden ver, por defecto, nuestras publicaciones o quién se puede poner en contacto con nosotros a través de Facebook.

Para ajustar la visibilidad de nuestras publicaciones no tenemos más que pulsar sobre el botón de “selector de público” y, dentro del menú, pulsar sobre la opción “más opciones” para que se muestren nuestras listas y una opción para personalizar aún más los ajustes. Lo mejor es apostar por una configuración personalizada porque, de esta forma, podremos ajustar qué grupos, por defecto, acceden a nuestras publicaciones y qué grupos, por defecto, no van a poder hacerlo.

Privacidad en Facebook

Otro detalle importante es ajustar las publicaciones que ya hemos realizado, algo que podremos hacer visitando el “registro de actividad” (ideal para publicaciones recientes) o bien “limitando el público de publicaciones antiguas” (donde aplicamos un criterio único a todas las publicaciones que hayamos hecho puesto que todo pasará a ser accesible, únicamente, por nuestros amigos).

Las opciones de privacidad también nos permiten ajustar quién puede ponerse en contacto con nosotros y enviarnos “solicitudes de amistad”. Si somos especialmente celosos con nuestra privacidad y queremos evitar que gente que no nos conoce se ponga en contacto con nosotros, lo mejor es que solamente nos puedan enviar solicitudes de amistad “amigos de nuestros amigos”, que Facebook no permita que Google indexe nuestro perfil y que solamente nuestros amigos nos puedan encontrar en Facebook usando, como criterio de localización, datos personales como el teléfono o el correo electrónico.

Otra de las secciones de los ajustes de Facebook que debemos visitar es la de biografía y etiquetado, sección en la que debemos ajustar quién o quiénes pueden publicar en nuestro perfil o ver el contenido de éste. Esta sección es importante para controlar si, por ejemplo, alguien sube una foto y nos etiqueta en ella porque podremos controlar quién puede ver esta imagen en la que supuestamente salimos.

Privacidad en Facebook

En el caso que tengamos en nuestra red usuarios que son “especialmente problemáticos” podemos recurrir a la sección de “bloqueos” de Facebook donde podremos crear una lista de personas que, a pesar de estar en nuestra red, solamente verán los contenidos que hemos publicado abiertamente (acceso restringido). También podremos bloquear usuarios concretos o, incluso, bloquear las invitaciones procedentes de ciertos usuarios (por ejemplo, si hacen spam de eventos o de aplicaciones o juegos de Facebook).

Una vez realizados estos ajustes, es conveniente que revisemos nuestro perfil para ajustar nuestras publicaciones antiguas y comprobar si por ejemplo alguna requiere que retoquemos quién puede verlas en base a las listas que hemos creado. También deberíamos revisar nuestros álbumes de fotos y, en caso necesario, editarlos para ajustar su privacidad y que solamente estén accesibles a las personas que consideremos oportunas (especialmente si hay fotos especialmente sensibles).

Privacidad en Facebook

El último aspecto a revisar es el de la información personal que compartimos en nuestro perfil (la pestaña “información”). La visibilidad de los datos que consignemos dentro de esta sección también se puede controlar. Por tanto, deberíamos repasar la “información básica y de contacto” para acotar quién puede ver nuestro correo electrónico o nuestro teléfono móvil (lo recomendable es que nadie salvo tú puedas ver estos datos), quién puede ver nuestra fecha de nacimiento o nuestras creencias religiosas o ideologías políticas, si es que compartes esa información.

¿Y ahora qué? Tras estos ajustes, nosotros como usuarios tendremos el control absoluto sobre nuestras publicaciones y, cuando vayamos a publicar algo, deberíamos ser conscientes que tenemos listas y que, por tanto, podemos controlar la audiencia de las cosas que publicamos. Cuando compartamos una foto o un enlace, Facebook, por defecto, la compartirá con el grupo (o grupos) que hayamos indicado en nuestras opciones de privacidad pero, eso sí, podremos cambiarlo antes de publicar y ajustarlo al nivel que consideremos oportuno (desde que esté accesible a todo el mundo a que solamente puedan verlo un grupo concreto de usuarios).

En Facebook, el usuario es el que mejor puede proteger su privacidad y, por tanto, debemos aplicar el sentido común. Si en nuestros contactos tenemos a nuestro jefe o compañeros de trabajo, es algo que, quizás, deberíamos tener en cuenta si vamos a publicar algo que afecte a nuestro entorno laboral.

My Permissions

Por cierto, no está de más que, de vez en cuando, revises qué aplicaciones y servicios tienen acceso a tu cuenta (y qué contactos pueden ver esta actividad) o bien recurras a servicios como MyPermissions para controlarlo cómodamente o hacer una purga y eliminar aquellas aplicaciones que ya no utilices.

Publicidad