¿ES PARA TANTO EL ÚLTIMO GADGET DE SONY?
SmartWatch: más que un reloj (pero poco más)
SmartWatch 2 es la nueva versión del reloj inteligente de Sony, cuyo primer modelo se lanzó en 2007. Se conecta con el teléfono y permite acceder a muchas de sus funciones desde la muñeca, pero en muchos casos simplemente retrasa unos segundos el momento de sacar el móvil del bolsillo.

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Cuando aparecieron los primeros rumores sobre un supuesto reloj inteligente de Apple, Sony ya hacía tiempo que había lanzado su primer modelo de SmartWatch. Antes, cuando Pebble arrasó con su campaña en Kickstarter, también. Y es que los japoneses llegaron a este mercado en 2007, cuando ni siquiera se había lanzado el primer teléfono Android. Es decir, saben lo que hacen. El problema es que es muy probable que los usuarios no lo sepan.
SmatWatch 2 es un producto elegante y sobrio, pero sin dejar de ser atractivo. Su pantalla sorprende y se convierte rápidamente en el centro de atención. Se lleva todas las miradas y genera interés, pero esto también hace que se enfrente a la pregunta más temida: ¿para qué sirve?
No hay una respuesta sencilla. Es un reloj, obviamente, y podría ser mucho más gracias a su conexión con teléfonos Android, pero por ahora se queda en el camino. En algunas ocasiones resulta útil, pero en la mayoría se queda simplemente en un paso adicional antes de sacar el teléfono del bolsillo.
Emparejar SmartWatch 2 es un proceso muy simple con teléfonos con NFC y ligeramente más complicado con los que no tienen. En cualquier caso, es sencillo y no lleva más que unos minutos. Una vez hecho esto el usuario puede comenzar a descargar aplicaciones para el reloj. Primera decepción. Y no es la peor.
Según Sony, hay unos 200 programas disponibles, pero esto no quiere decir que todos ellos sean útiles. En la práctica, hay poco más de una decena que vayan a ser utilizados con frecuencia (es decir, una vez pasado el período de curiosidad inicial). Al menos la búsqueda está dividida por categorías, lo que agiliza mucho el proceso.
Desde la tienda es posible descargar aplicaciones (tanto de pago como gratuitas) con las que aumentar las funciones del reloj. Hay algunos juegos simples, más aspectos para el reloj, alarmas, centros de notificaciones para algunas redes sociales y poco más. No está mal para un mercado que todavía está en pañales (por mucho que el primer dispositivo llegase hace 6 años), pero queda muchísimo camino por recorrer.
Lo malo no es la escasez de aplicaciones, sino la poca utilidad de las mismas. SmartWatch 2 vibra cuando se recibe un correo, mensaje de Facebook o mención en Twitter y podemos acceder a ellos desde la muñeca. Eso sí, si queremos ver todo el cuerpo de los mensajes o interactuar con ellos tendremos que recurrir al teléfono. Sólo Twitter consigue salvarse, ya que la limitación de 140 caracteres juega a su favor. Es posible establecer notificaciones para distintos usuarios y marcar como favoritos o retuitear tweets directamente desde el reloj.
Sin embargo, en el resto de ocasiones nos encontraremos con un paso adicional en la muñeca. Así, por ejemplo, podemos acceder a la agenda desde el reloj y seleccionar un contacto para llamarle, pero la acción no se podrá completar sin el teléfono. Es lo lógico, pero eso no quiere decir que sea práctico. ¿Qué sentido tiene usar SmartWatch para hacer lo mismo que se puede hacer desde el móvil, si además es más incómodo?
De todos modos, hay que reconocer que hay aplicaciones útiles, como el aviso de llamadas entrantes, que permite rechazar la llamada y enviar un mensaje predeterminado y otras curiosas, como el modo presentación, que muestra las fotografías almacenadas en el teléfono. Y, por otro lado, no hay que olvidar que son funciones adicionales que no proporciona prácticamente ningún reloj. Quien le encuentre su uso, estará encantado.
A nivel de hadware, encontramos una pantalla de 1,6 pulgadas con una resolución de 220 x 176. Los píxeles son perfectamente visibles, pero por lo demás, es perfecta. Responde bien, resiste golpes, humedad y polvo y se ve de forma nítida tanto con luz natural como sin ella. La batería aguanta entre tres y cuatro días de uso y se carga en poco más de una hora y en total el dispositivo pesa tan solo 122,5 gramos.
El precio, 189 euros (más 24,90 adicionales si queremos una correa de cuero), también es bastante atractivo. No es una ganga, pero tampoco se puede considerar exagerado, especialmente si se compara con otros relojes mucho más limitados. Además, cada vez hay más interés por este tipo de dispositivos, así que con el tiempo aumentará el número de aplicaciones disponibles que podrían hacer de SmartWatch 2 mucho más de lo que es hoy.
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