Proyecto Hera: el ambicioso plan de defensa planetaria de la NASA y la ESA contra asteroides peligrosos

El pasado 15 de septiembre la Agencia Espacial Europea (ESA) firmó un contrato con la NASA para el desarrollo de la misión Hera, que tiene como objetivo estudiar la desviación de un doble asteroide que tendrá un acercamiento a la Tierra en 2022.

El contrato, valorado en 130 millones de euros, ha sido adjudicado al consorcio encabezado por la empresa OHB System AG, con sede en Bremen, Alemania. Los gastos cubren la fabricación y las pruebas de funcionamiento del satélite que protagonizará la misión. La firma de este acuerdo multimillonario ha tenido lugar en el Centro Europeo de Operaciones Espaciales de la ESA en Alemania, que servirá como centro de control de la misión.

Los asteroides son una amenaza a la vida tal y como la conocemos. Aunque parezca algo exagerado, según el Laboratorio Lunar y Planetario de la Universidad de Arizona, nuestro planeta ha sufrido más de tres millones de cráteres de impacto de más de 1 km de diámetro, el más grande con más de 300 km. No tenemos que irnos muy lejos para observar el efecto que tienen las colisiones de estos cuerpos. La Luna está llena de cráteres producto de estos sucesos.

DART es una prueba de tecnologías desarrollada por la NASA con el objetivo de prevenir el impacto de asteroides peligrosos en la superficie terrestre. En octubre de 2022, la nave de esta misión tendrá que colisionar contra el asteroide Dimorphos, de 160 metros de ancho y desviar su trayectoria. Posteriormente, en 2024, la misión Hera de la ESA será lanzada para observar los resultados del único objeto en el Sistema Solar cuya órbita será desplazada por el ser humano de una manera mensurable.

Está previsto que DART deje un cráter en Dimorphos que, posteriormente, podrá ser observado por Hera gracias a los dos CubeSats que llevará instalados, nanosatélites que permitirán realizar mediciones espectrales detalladas del asteroide y medir el campo gravitariorio del mismo. Así los investigadores podrán evaluar la efectividad de la técnica de deflexión de la manera más completa posible. Si resulta efectiva, este método podrá emplearse si es necesario contra un asteroide que se aproxime a nuestro planeta y que ponga en peligro la vida.