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TODO APUNTA A QUE LA VUELTA DE PHILAE VA POR BUEN CAMINO

Ahora que ha despertado, ¿qué le espera a Philae?

Como si de un Fénix se tratase, Philae ha vuelto cuando muchos la daban por perdida. Ahora se abre todo un abanico de posibilidades porque el cometa está a pocas semanas de su perihelio, por lo que la actividad del cometa va en un progresivo aumento. Con Rosetta orbitando y Philae a pie de cometa, la información de ambas sondas dará unos datos sin precedentes de la actividad de estos cuerpos en su aproximación al Sol.

Una de las primeras imágenes que envió Philae desde la superficie del cometa el pasado mes de noviembre

Una de las primeras imágenes que envió Philae desde la superficie del cometa el pasado mes de noviembre ESA/Rosetta/Philae/CIVA

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Como ya os contamos, Philae despertó tras siete meses de letargo sobre el 67P/Churyumov-Gerasimenko. Ahora el cometa se está acercando al Sol, donde tendrá su máximo acercamiento o perihelio el próximo 13 de agosto. Con sus -35º C de temperatura y 24 vatios de potencia, Philae está en condiciones óptimas de trabajo y, por supuesto, también Rosetta. Serán unos testigos privilegiados de los cambios que sufrirá 'Chury' a partir de julio, cuando realmente esté cerca del Sol.

Pero ahora la prioridad para Philae es enviar los más de 8.000 paquetes de datos almacenados en sus discos. La cantidad de información recolectada indica que cuando Rosetta escuchó de nuevo a Philae ya llevaba un tiempo funcionando. Por tanto, una vez recibidos los datos podremos saber el momento exacto de la reactivación de la sonda.

Lo que no tenemos todavía es información sobre los instrumentos, por lo que una vez recibidos todos los paquetes se hará un chequeo general y entonces se procederá a una valoración real sobre la reactivación de los dispositivos. "Si logramos alcanzar y mantener un patrón de contacto predecible, los equipos del 'lander' pueden idear una estrategia para una nueva secuencia de operaciones científicas”, explica Paolo Ferri, jefe de operaciones de misiones de la ESA.

Con esa estrategia de la que habla Ferri volveremos a disfrutar de los detalles más íntimos de la superficie del cometa, pero esta vez con una diferencia con respecto a noviembre: habrá actividad cometaria, habrá cabellera y podremos ver cómo afecta esta actividad a la superficie.

Independientemente del estado de los instrumentos, lo que sabemos es que Philae ha vuelto cuando pocos daban un duro por ella, y esa vuelta dice mucho a favor de la industria espacial europea. De momento, y desde que se retomó la comunicación, todos los sobrevuelos han sido satisfactorios en cuanto a contacto con Philae, por lo que parece que esta nueva puesta en funcionamiento es estable.

Todo apunta a que tendremos un verano movidito en cuanto a cuerpos menores se refiere. Con Rosetta y Philae activas y la New Horizons a punto de su máximo acercamiento a Plutón y su sistema de lunas, podremos disfrutar de los resultados que nos lleguen de estos dos cuerpos celestes tan mediáticos como interesantes.

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