Rick y los suyos consiguen salir de Woodbury, pero con uno más: Merle. Al salir, encuentran a Glenn y Michonne, y al juntarse con Merle descubren todos que Andrea también se encontraba en Woodbury. Al haber hecho tanto daño Merle, todos deciden que no les acompañe a la prisión, entonces Daryl decide irse con su hermano, abandonando al grupo.

Mientras, en la prisión, aceptan a los que llegaron por casualidad huyendo de los caminantes: Sasha, Tyreese, Allen y Ben. Allen y Ben planean robarles las armas para estar ellos seguros pero Sasha y Tyreese les conducen a hacer todo bien, quieren quedarse y creen que son buenas personas.

En Wooodbury cunde el pánico desde el atentado. El Gobernador no quiere plantarle cara a la situación, y todos los habitantes de Woodbury quieren abandonar la ciudad porque piensan que ha dejado de ser segura al haber entrado caminantes. Andrea logra calmarlo.

Al llegar Rick a la prisión y cuestionar si los nuevos se quedan o no, comienzan a jugarle malas pasadas sus delirios. Una aparición de Lori le hará cambiar y dejar a todos asustados...