Desde que se estrenó en octubre de 2018, 'Élite' ha sido una de las series españolas más vistas en streaming, llegando a ocupar el primer puesto de la lista. Netflix tiene tan claro que es un bombazo que la presentación de su sexta temporada ha venido acompañada del anuncio de que habrá, por lo menos, una séptima. Para enterarnos de más novedades nos hemos reunido con sus directores y con algunos de sus actores que, con mucho cuidado de no hacer spoilers, nos han contado cómo se sienten en esta nueva etapa de la serie.

Álex Pastrana y Carmen Arrufat son algunas de las incorporaciones más jugosas del nuevo curso en el exclusivo y turbulento instituto de Las Encinas, pero hay mucho más. La sexta temporada está estructurada sobre el desarrollo de tres tramas esenciales. Por un lado la tóxica relación de los personajes de Arrufat y Pastrana, y por otro la homofobia en el deporte y la percepción juvenil de la transexualidad.

 

Como dice su creador, Carlos Montero, "resulta muy complicado mantener durante tanto tiempo a los actores porque quieren hacer otras cosas, crecen y ya no se ven con los uniformes". Esto ha permitido a los guionistas de una de las series españolas más exitosas dentro y fuera de nuestro país a hacer de la necesidad virtud, pudiendo abrir nuevas temáticas y líneas argumentales que en manos de los personajes más veteranos resultarían imposibles.

Un personaje trans

Un buen ejemplo de esto es la llegada de Ander Puig, que interpreta a un joven trans que tendrá que buscar su propio hueco en el instituto. Como dice el propio Puig "mi personaje está bien, no le pasa nada, es feliz desde su transición y está contento consigo mismo, yo diría que ni siquiera se acuerda de que es trans". El problema es que algunas actitudes a su alrededor acabarán por mellar su seguridad y generarle nuevas crisis con las que no contaba.

Hacía tiempo que en Élite se quería tratar este tema pero, como el guionista Jaime Vaca y el propio Carlos Montero aseguran, era esencial dar con el actor adecuado y ahora están convencidos de haberlo conseguido. Vaca dice que no querían "contar el proceso de transformación, eso ya se ha contado, aquí queríamos el momento posterior. Montero añade que podrían "haber creado un contexto progresista donde todos acogen de maravilla a Nico", así se llama el personaje de Ander Puig, "pero no sería realista ni interesante".

En nuestro ADN está la diversidad.

Jaime Vaca

El actor, por su parte, está orgulloso de que se dé visibilidad a la realidad trans en una ficción de tanto éxito porque aunque "esto no es un reflejo certero de la realidad, se trata de entretener, puede mostrar nuevos referentes que para muchos jóvenes son importantes”. En su vida real Puig reconoce que se ha encontrado con mucha incomprensión por falta de conocimiento de la realidad trans y no es de extrañar que en Élite se hayan lanzado con este tema porque, como dice Jaime Vaca, "en nuestro ADN está la diversidad.

El influencer tóxico

Un mundo extremo, cargado de belleza y retransmitido en tiempo real por teléfono con chavales que si se calientan se suben a un helicóptero para ir de fiesta. ¿Qué tiene que tener uno de ellos para ser influencer? Lo sabremos conociendo a Raúl y a Sara, los personajes interpretados por Álex Pastrana y Carmen Arrufat. Pero, seguramente, no sean sus dotes de líderes en las redes lo que nos sorprenda, sino la forma en que Raúl trata a Sara y cómo ella va tratando de saber cómo debe reaccionar.

Sara ha ido haciendo concesiones a un comportamiento tóxico que se traduce en situaciones desconcertantes. Localizarlas y aprender a reivindicarse será esencial para ella que, como dice Arrufat, irá evolucionando hacia la sororidad y aprendiendo a desprenderse de cosas chungas que no molan". Como dice Montero "ya habíamos tratado este tema, aunque lo hacemos de un modo más frontal, y Jaime Vaca puntualiza que existen muchas variantes de relaciones tóxicas.

ÉLITE Raúl

Isadora dará que hablar

La escena de la violación en grupo de la quinta temporada generó una gran polémica por el supuesto blanqueamiento de un delito inaceptable. Pero la cosa no va a quedar ahí. Los diferentes prismas de los protagonistas principales de aquella trama saldrán a la palestra y, de un modo u otro, todo el mundo en Las Encinas está llamado a posicionarse. Después de varios días de vaivenes nos vimos atrapados en la extraña dicotomía de dilucidar si aquello había sido o no una violación. La propia Isadora parecía querer llevarnos en esa dirección con su negación inicial, pero al final lo tuvo claro y denunció.

A Isadora la hacen pasar por una doble victimización.

Ana Bokesa

Como dice Zenere, a partir de ahí "el problema es que, cuando finalmente des el paso, se queda sola, nadie parece creerla y debe convivir con los que le hicieron eso, en el mismo lugar". En eso de estar y sentirse sola su personaje es una experta, pero esto es distinto porque, como dice Ana Bokesa, que interpreta a Rocío, "a Isadora la hacen pasar por una doble victimización. De todos modos, siguiendo a Carmen Arrufat en eso de que "las tramas te sorprenden y pueden salir por donde no te esperas" habrá que esperar para ver en qué queda este peliagudo tema. Mientras tantoIsadora no se librará del juicio de Didac, que tiene muy claros sus valores y trata de hacer discernir a los demás entre lo que está bien y lo que está mal. El problema es que en Las Encinas, como ya nos han demostrado en otras ocasiones, nada tiene por qué ser lo que parece.

Patrick Blanco no sabe enamorarse

Esto ya lo sabíamos, pero lo reitera Manu Ríos que, metido en el personaje de Patrick, trata de mostrarnos cómo el origen de nuestras propias desgracias puede venir dado por nuestra propia incapacidad para creernos las cosas buenas que nos pasan. Esa disyuntiva constante en Patrick es el motivo del desconcierto de Iván que, según André Lamoglia, "va a dar mucha pena por las cosas que le pasan en esta nueva temporada".

Patrick, está descolocado porque no está acostumbrado a que le quieran de vuelta.

Manu Ríos

Su relación es un aprendizaje constante en el que los errores se pagan con dolor y descargas enormes de frustración. Pero su particular montaña rusa también los lleva a experimentar sensaciones increíbles cuando saben ir en la misma dirección. "El problema es que Patrick, está descolocado porque no está acostumbrado a que le quieran de vuelta" explica Manu Ríos. André, por su parte, es abierto y comprensivo, pero su paciencia es ya una cuerda con pocas hebras intactas y hacia la mitad de la temporada podría sufrir una fuerte transformación.

ÉLITE Patrick e Iván