Cuando agentes de la Guardia Civil registraban la vivienda de la familia de Antonio Anglés, en busca de pruebas que pudiesen ligarlo con la desaparición de las tres niñas de Alcàsser sonó el teléfono. Los agentes escucharon atentos una llamada que dejaba muchas incógnitas por resolver.
"Kelly, soy yo, Rubén. Cuando venga, le dices al 'El Rubio' que vaya donde está el plato y la maneta de la moto. Que traiga los dos sacos de dormir y los Kellogg's y la leche que hay encima de la nevera. ¿Sabes?, lo antes posible".
Más Noticias
- El creador de 'Elite' desvela qué personaje "clave" vuelve en la octava temporada de la serie
- 'Machos Alfa' confirma su cuarta temporada y será adaptada para Alemania, Francia, Países Bajos e Italia
- Este domingo atresplayer estrena 'Si lo dice mi madre', el dating show de Flooxer presentado por La Pija y la Quinqui
- Netflix desvela el protagonista de la cuarta temporada de los 'Bridgerton' con un primer tráiler
- Llegan las primeras imágenes de '¿A qué estás esperando?', la serie de atresplayer basada en las novelas de Megan Maxwell
Eso es lo que se escuchó al otro lado del teléfono y que el exsargento de la Guardia Civil José Moreno Alegre aún recuerda bien: "Se comunicaba de una forma como ocultando datos", explica en la docuserie 'Anglés: Historia de una fuga'.
Así fue el registro de la Guardia Civil en el piso de Antonio Anglés: "No hubo alteración hasta que llegó Miguel Ricart"
El sargento de la Guardia Civil que registró la casa de la familia Anglés en busca de una pista sobre el triple asesinato de Alcàsser narra en la docuserie 'Anglés: Historia de una fuga' cómo fueron esos momentos.