Los showrunners de 'Juego de tronos' David Baenioff y Dan Weiss están presentando su nuevo proyecto, la serie de ciencia-ficción para Netflix 'El problema de los 3 cuerpos'. Sin embargo, no es fácil escapar de la sombra de una serie como 'Juego de tronos' que se ha convertido en una de las mejores de todos los tiempos. Es inevitable que les sigan preguntando por ella, por mucho que ellos intenten evitar seguir reflexionando sobre ella ya que creen que criticarla ahora "no les beneficia ni a ellos, ni a HBO, ni a las miles de personas que trabajaron en ella".

Aún así, en una entrevista para The Hollywood Reporter sobre sus nuevos proyectos sí contestaron a algunas preguntas. En concreto, respondieron a la pregunta de si había algo que admitirían que les habría gustado cambiar de 'Juego de tronos'. Y la respuesta seguramente sorprenda porque no se refiere a los hechos más importantes de la trama.

Lo que cambiarían está relacionado con el actor Ciaran Bermingham que interpretó al personaje de Mord, el carcelero, el guardián de las Celdas del cielo que atormenta a Tyrion Lannister durante su cautiverio en el Nido de Águilas. El pequeño de los Lannister ofrece a su carcelero dinero a cambio de ayudarle a escapar y cuando lo consigue le arroja un saco de monedas recordando el lema de la casa a la que representa: "Un Lannister siempre paga sus deudas".

Eso sucedió en la primera temporada y Benioff y Weiss lamentan "no haber traído de vuelta a Mord, el carcelero". Aseguran que eso "fue un error". Los guionistas aseguran que "habían hablado de hacerlo" y que además "tenían el escenario perfecto". Habría sido más adelante en una "escena de taberna" en la que Mord podría haber aparecido de fondo al frente del negocio. "Nos dimos cuenta demasiado tarde de que Mord podría haber sido el dueño de la taberna", lamentan y añaden que "era una idea obvia y fácil, sobre todo vista a posteriori".

Quizá para el público que siguió la serie este sea un detalle insignificante que cambiar y preferirían cuestionar otros como el personaje que acaba sentándose en el trono de hierro o las decisiones sobre acabar con la vida de algunos de los protagonistas, pero esto es lo único que los guionistas están dispuestos a reconocer.