Tras la trágica muerte de Matthew Perry, el pasado viernes por la tarde se celebró un funeral privado por el actor, uno de los seis protagonistas de la serie 'Friends'. Se trató de una ceremonia íntima a la que asistieron su familia y allegados entre los que se encontraban los otros cinco coprotagonistas la mítica telecomedia.

Según informó la revista 'People', Jennifer Aniston, Matt LeBlanc, David Schwimmer, Courteney Cox y Lisa Kudrow acudieron al acto, celebrado en el Forest Lawn Memorial Park de Los Angeles. Un lugar en el que también se dio el último adiós a otros nombres notables como Paul Walker, Carrie Fisher, Debbie Reynolds y Nipsey Hussle. El funeral del interprete de Chandler comenzó sobre las 15.00 horas y finalizó sobre las 17.00 horas.

Sus compañeros de reparto protagonizaron un silencio de dos días después de la muerte de Perry, pero tras procesar la noticia, los otros cinco protagonistas de la serie de 'Friends' emitieron un comunicado conjunto en el que lamentaban la muerte de su compañero de reparto. "Estamos totalmente devastados por la pérdida de Matthew. Éramos más que compañeros de reparto. Éramos una familia. Hay mucho que decir, pero ahora vamos a tomarnos un momento para llorar y procesar esta pérdida insondable", escribieron los actores.

El cuerpo de Perry fue hallado en el jacuzzi de su domicilio de Los Angeles y los forenses aún están esperando más pruebas tras realizar la autopsia, especialmente los resultados de los informes toxicológicos, para determinar oficialmente la causa de la muerte del actor. Hasta ahora se conoce que no se encontraron signos de violencia ni restos de drogas o alcohol en el lugar en el que fue encontrado el cadáver.

Perry y su problema de adicción a las drogas

Perry habló en varias ocasiones sobre su lucha contra el alcoholismo y la drogadicción en la que cayó tras saltar a la fama en los años 90. Se hizo adicto al Vicodin y a las drogas, tal y como relató en sus memorias de 2022, 'Friends, Lovers and the Big Terrible Thing' ('Amigos, amantes y aquello tan terrible'), pero el actor ingresó en rehabilitación tras un accidente de moto acuática en 1997 parasolventar su problema de adicción.

Más tarde, en el marco de esta lucha constante contra su adicciones, convirtió su propiedad de Malibú en un centro de sobriedad y tras su muerte, sus familiares anunciaron la creación de una fundación con su nombre para ayudar a quienes luchan contra las diferentes adicciones.