La cantante Britney Spears está siendo observada con lupa, sobre todo tras la publicación de su libro de memorias. Todo lo que hace es noticiable, hasta el hecho más rutinario.

Como se ve en el vídeo presentado por Miki Nadal, la cantante es parada por un agente de tráfico tras haber cometido dos infracciones de tráfico: correr demasiado y cambiar mal de carril.

La 'princesa del pop' no duda en excusar su mala conducta al volante diciendo que "tenía que hacer pis". A pesar de su excusa, Britney no se sale con la suya y se lleva una multa y, de regalo, un tirón de orejas por parte del agente.