"La compraventa de segunda mano es un negocio en auge desde hace algunos años, pero tiene riesgos", advierte Quique Peinado a sus compañeros, a los que muestra la conversación viral entre un vendedor y un comprador por algo "tan común como unos calcetines negros", aunque el interés que despertaron "no fue tan común", comenta.

Y, es que, el comprador le preguntó que si olían. Una pregunta a la que la compradora contestó que no porque "nunca" los había llegado a usar: "Y ahí se fastidió la venta", explica Quique Peinado, porque el siguiente mensaje del usuario fue: "Los buscaba de la otra manera". "Podría haberle metido un queso dentro toda una tarde", sugiere Dani Mateo a la vendedora que ha dejado escaapar esta oportunidad tras conocer esta surrealista historia cargada de fetichismo, que puedes conocer en el vídeo principal de la noticia.