Una tiktoker española se hace viral por usar la propia orina para curar el astigmatismo y la miopía. Esta rechaza los colirios de la farmacia por contener químicos y asegura que ella curó sus problemas de vista aplicándosela dos veces al día.

Boticaria García explica que tanto en la miopía como en el astigmatismo hay un problema de refracción y apunta que para solucionarlo, "las gotas de orina deberían poder cambiar con precisión la curvatura de la córnea o variar el ancho del ojo", pero "no se ha demostrado que eso se pueda conseguir" con dicha sustancia.

Además, apunta que la orina está llena de compuestos químicos, como el amoniaco, la urea o el ácido úrico, "las cositas que el cuerpo no quiere", destaca, y señala que puede estar "aliñada con bacterias".

Por esta razón, advierte que, al ser ácida, su aplicación reiterada en las mucosas puede provocar irritación, inflamación, lesiones permanentes, así como conjuntivitis o queratitis. Pero también puede generar problemas en el caso de aquellos que la usan para curar quemaduras o se la beben, ya que puede ser agresivo para el tracto intestinal, afectar a los riñones o causar infecciones.