Zapeando ha notado la ausencia de buena parte de las mujeres que sacan adelante el programa porque han hecho huelga. Los rótulos, de hecho, no han funcionado. "Si alguien quiere contactar con nosotros, estas son las direcciones de Twitter", ha dicho Frank Blanco mientras sacaba su dirección de esta red social escrita en un papel.

"Lo hacemos así porque no podemos hacerlo de otra manera", han dicho los chicos.

Quique Peinado intenta recurrir al humor, aunque con poco éxito: "Podemos hacer virguerías con los papeles y hacer de la necesidad virtud, parecemos una clase de plástica".

A pesar de que intentan ser graciosos, confiesan que "falta la mitad del equipo de guionistas, que son chicas, y por eso los chistes son los que son".