El inspector gastronómico siempre se le ha imaginado como un hombre solitario con "gafas y nariz de goma", apunta Dani Mateo. Pero lo cierto es que esto poco tiene que ver con la realidad, tal y como confiesa Toño Pérez, chef y propietario del restaurante Atrio de Cáceres, que acaba de hacerse con su tercera Estrella Michelin, la "más celebrada de la noche", según Cristina Pedroche. "No es fácil detectar o reconocer a los inspectores", confiesa. Si alguna vez los "reconocemos es al final, pero no sabes realmente si son. Su anonimato es parte de su trabajo".

De todas formas, "para nosotros todos nuestros clientes son inspectores", confiesa Toño Pérez durante esta entrevista, en la que bromea con que lleven gafas y nariz de goma: "Ellos saben cómo tienen que actuar para ser absolutamente anónimos. En mi casa lo consiguen", aunque también reconoce que no están "demasiado pendientes" porque intentan "dar la talla y estar a la altura en todas las situaciones".

Escucha la entrevista al completo a Toño Pérez, ganador de su tercera Estrella Michelin, en el vídeo principal de la noticia, donde también habla de cómo fue el momento en el que recibió el reconocimiento y de si existen criterios a la hora de evaluar un restaurante para darle una Estrella.