Meghan Markle es noticia no solo por sus desavenencias con la familia real británica sino también por, por ejemplo, unos curiosos parches que lleva colocados en su muñeca. Estas pegatinas no son otra cosa que parches antiestrés que tienen un coste de 80 dólares el paquete de 20.

Como explica Boticaria García, estos parches con "un disco de procesamiento de bioseñales que activa el sistema nervioso parasimpático". Están creados para mantener a raya el estrés, frenar la adrenalina e iniciar un proceso de relajación. En cuanto a su efectividad, la farmacéutica tiene serias dudas. Como cuenta, "que envíe señales al pericardio, la membrana que rodea al corazón, para activar las fibras nerviosas parasimpáticas que imite el sueño y demás... eso ya no está tan demostrado".

A pesar de que el efecto de los parches, como tal, no está demostrado sí que pueden tener un efecto placebo en las personas que los utilizan. Como explica Boticaria, "el efecto placebo es totalmente real", y añade que "en la corteza prefrontal se liberan unos neurotransmisores que te hacen sentir mejor cuando tu crees que te tienes que sentir mejor". Como explica, esto funciona con problemas que son "un poco subjetivos como el dolor o el sueño".