Maya Pixelskaya repasa en Zapeando cómo está la situación del mercado laboral para los robots, analizando casos como el de un androide gigante que realiza labores de mantenimiento en ferrocarriles o los que envasan fideos con 'manos' en forma de tenedores.

Pero también los robots "sienten la presión", como lo que le ocurrió al robot parrillero Flippy, contratado por una cadena de hamburguesas: en su primer día, no logró dar abasto y cortocircuitó literalmente. Pero también en el entorno laboral robótico es necesario actualizarse: si no, las máquinas corren el riesgo de que otras las adelanten y le quiten el trabajo, como le ha ocurrido al robot heladero que puedes ver en el vídeo principal.