Rafa Castaño ha hecho historia en Pasapalabra al hacer El Rosco de forma correcta del tirón y llevarse el bote más alto de la historia. Y, es que, se ha metido en el bolsillo nada más y nada menos que 2.272.000€.

Sin embargo, algo que impactó a toda la audiencia fue que apenas lo celebró, se quedó como en "shock": "¿Qué pasó ahí?", le pregunta Quique Peinado, a lo que él no duda en responder: "Pensaba en Orestes y en el mal trago que era para él".

"Estaba contento por mí, es obvio, pero no lo celebré porque habría sido una falta de respeto para él", confiesa el ganador del bote, ya que "él también se lo merecía". De hecho, en el vídeo principal de la noticia, comenta con los zapeadores que ni tan siquiera le salió "ser muy efusivo", algo que provoca que el plató de Zapeando estalle en un emotivo y sonoro aplauso.