Gotzon Mantuliz ha contado en Zapeando sus aventuras con tigres, pumas, elefantes y, esta vez, ha ido a visitar al carnívoro más grande del mundo, el oso polar. El vasco se ha desplazado hasta Longyearbyen, la localidad más al norte del planeta, situada en las islas noruegas de Svalvard.
El aventurero explica que ha tenido mucha suerte en su viaje porque, en nueve días en el barco, ha podido ver 12 ejemplares. Estos cazan focas, unas 50 al año, así como morsas, belugas o huevos de pájaros. Además, le ha sorprendido la diligencia con la que siguen el protocolo en caso de un encuentro con osos polares, pues, "en otros países, se lo pasan un poco a la torera": "Aquí el peligro debe ser muy real".
Tanto es así, que Mantuliz cuenta que dieron un aviso a otro barco para evacuar la playa, donde había un grupo de personas observando las morsas, por la inminente llegada de un oso. "Eres un superhéroe, lo tienes todo", le espeta Dani Mateo.
También ha podido comprobar el estado de la placa de hielo del Ártico y los glaciares, que, según le contaron los locales, "están retrocediendo con el paso de los años" y se calcula que, en los próximos 40 años, disminuya un tercio la población de osos por el calentamiento global.