Cristina Pedroche cuenta en Zapeando el curioso plan que trazaron unos Marshals en EEUU para atrapar a delincuentes fugados en los 80. Esta unidad federal de policía diseñó una llamativa estratagema que incluía el deporte rey en Estados Unidos: el fútbol americano.

El 15 de diciembre de 1985 se iba a jugar un partido de fútbol americano en Washington. Los policías decidieron enviar a los fugitivos una carta a su última dirección conocida con una invitación para el partido que iba a disputarse. A esta entrada, se incluía la posibilidad de ir a la final de la Super Bowl. Su intención era detenerlos al llegar al Centro de Convenciones de Washington, donde los habían citado.

La policía preparó la operación transformando a 166 policías y Marshals en personal del centro. Finalmente, de los 3.000 delincuentes a los que habían enviado una carta se presentaron 100 a los cuales pudieron detener.