Maya Pixelskaya visita Zapeando para hablar de uno de los lugares más seguros de la tierra donde se almacena el conocimiento humano. Recibe el nombre de "Archivo mundial del Ártico" y es un proyecto que pretende conservar datos e información irremplazable frente a posibles amenazas climáticas o humanas.

Este archivo se encuentra en el archipiélago de Svalbard, en el Ártico noruego, dentro de una bóveda a 200 metros de profundidad en una mina de carbón desmantelada. Visitar el lugar requiere protegerse bien de las inclemencias ya que su temperatura se encuentra entre los cinco y los siete grados bajo cero debido a que sus paredes están cubiertas de permafrost.

Para que la información que conserva persista durante tanto tiempo los datos se han almacenado en películas fotosensibles super resistentes. Para recuperarlos no se necesita electricidad sino una fuente de luz suficiente para leer la película. En el archivo se pueden encontrar desde cuadros, como 'El grito' de Munch, a libros, por ejemplo la 'Divina comedia' de Dante. Además de instituciones, cualquiera puede alojar datos en el archivo por un coste de 8.900 euros.