La edad en el cine es algo muy relativo. De hecho, muchos actores han interpretado papeles de padres e hijos con solo uno, dos o tres años de diferencia.

Es lo que le ocurrió a Angelina Jolie y Collin Farrell en 'Alejandro Magno'. Ella tenía 29 años y él, 28, pero interpretaron a una madre y un hijo. Algo similar se dio en la película 'Forrest Gump'. Sally Field tenía 48 años y Tom Hanks, 38, y pese a que 10 años interpretaron a una pareja, en este caso hicieron de madre e hijo.

El crítico de cine Alberto Rey nos muestra en Zapeando muchos ejemplos que demuestran que la edad en el mundo de la interpretación es muy relativa.