Alberto Chicote llama a la Asociación Prohuérfanos de la Guardia Civil para preguntar sobre la intoxicación sufrida por 80 universitarios en la residencia que gestiona, Duque de Ahumada.

Pero el presentador no recibe una buena respuesta al respecto: "Vamos a ver, caballero, yo no tengo autoridad para darle esa información, algún bulo por ahí ha habido...". Chicote, sorprendido, deja claro al receptor de la llamada que la intoxicación "no es ningún bulo".

El hombre, sigue sin querer facilitar datos a Chicote y le pide que vuelva a llamar al día siguiente en horario de oficina. "Me da rabia porque estoy en la puerta viendo la bandera", destaca el presentador, sin esperar que la persona con la que está hablando le confiese que le está viendo por la ventana. "Ah, ah, ¿me esta viendo?, bueno, pues le saludo", afirma Chicote ante la negativa de poder acceder al lugar.

Al día siguiente, Chicote vuelve a llamar a la residencia, de la cual al frente se encuentran guardias civiles en la reserva. El exitoso chef se vuelve a encontrar con una negativa: "Me dicen que no pueden hablar, que no están autorizados ni interesados".

Aunque el chef sigue hablando al teléfono, ya no hay respuesta al otro lado. "¡Uy se ha cortado, esto de los teléfonos...!", destaca un incrédulo Chicote. "Ha sido decir mi nombre y el de la residencia y ya hay alguien que no está interesado, qué cosa más curiosa", declara alucinado.

Otros momentos destacados

Chicote también intentó pedir explicaciones a Madrid Salud, pero ningún responsable responde por las intoxicaciones en las residencias de estudiantes, y se pasan la pelota unos a otros. "Los responsables del comedor de la residencia tienen la información emitida por el laboratorio y son éstos los que tienen la obligación de informar a los residentes", le contestó la jefa de Unidad de Brotes y Alertas Alimentarias del Ayuntamiento de Madrid al chef.

Pero las pruebas de que en algunas residencias los alimentos no están del todo en buen estado existen. Un estudiante que vive en una residencia en Sevilla le muestra a Chicote imágenes de fruta con moho y cubiertos "pegados por la mierda".