Alberto Chicote se pone en contacto con un militar de Valencia para comprobar si es cierto que reciben una alimentación de mala calidad.
El joven, que lleva cinco años en el Ejército y cobra un sueldo de 900 euros, asegura que ha llegado a ver "tortilla de patatas con moho de varios días, comida gusanada y fruta podrida".
Asegura que él y sus compañeros se "mueren de hambre" porque tienen "un gasto energético muy alto" y no se alimentan de manera correcta.
En este sentido, denuncia que una vez "después de haber hecho 20 kilómetros de ejercicio, no fueron capaces" de darle "una botella de agua".
Chicote destapa el error del menú en el Ejército: "El equilibrio nutricional está más bien olvidado"